El gasoducto marino que conecta al sur de Texas en Estados Unidos con Tuxpan, México, inició operaciones comerciales, informó el martes el consorcio encargado de su construcción conformado por las empresas IEnova, filial de Sempra Energy, y TC Energy.
El arranque de las operaciones ocurre después de que el gobierno de México, a través de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y las empresas de infraestructura energética lograran un acuerdo en una disputa sobre el millonario contrato de construcción.
El gasoducto de 772 kilómetros abastece de combustible para alimentar a varias plantas de generación ubicadas en Altamira, Tuxpan, y en la región central de México, informaron las firmas en un comunicado.
Acuerdo generará ahorros
Con la renegociación de los contratos el gobierno federal ahorrará 672 millones de dólares, los contratos se extienden por 10 años más y Fermaca se comprometió a invertir 12 mil millones de pesos adicionales, para impulsar la industria eléctrica en el sureste del país.
La semana pasada, el director de la CFE, Manuel Bartlett, explicó que se garantiza el suministro de gas desde Texas hasta el occidente de México, a través de los dos gasoductos más importantes del país: Laguna de Aguascalientes y Villa de Reyes, Aguascalientes-Guadalajara.
Luego de la presentación de cuatro contrapropuestas por parte de Fermaca desde el 26 de agosto, acordaron reducir las tarifas en los ductos hasta en un 25 por ciento, para Laguna Aguascalientes baja de 14 a 11 centavos de dólar, y en el de Villa Reyes se reduce en un 18 por ciento, de 12 a 10 centavos de dólar.
Con información de Reuters