El flujo de remesas en México tendrá un crecimiento anual de 21.7 por ciento en 2021 y llegará a 49 mil 400 millones de dólares, estimó BBVA México.
Este crecimiento se dará pese a las afectaciones económicas por la pandemia, debido a las malas condiciones laborales que hay en el país, según Carlos Serrano, economista en jefe de la institución financiera.
En 2020, el envío de remesas a México cerró con 40 mil 606 millones de dólares, lo que representó un alza de 11.44 por ciento, respecto a 2019, y su mayor monto desde que se tiene registro, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico).
Esta cifra fue inferior al estimado del presidente Andrés Manuel López Obrador, que dijo que las remesas llegarían a 40 mil 574 millones de dólares, con un aumento de 11.3 por ciento con relación al año previo.
Actualmente, según el economista en jefe de BBVA México, las remesas ya son la principal fuente de divisas al país, mismas que exceden el flujo de dólares por exportaciones petroleras o cualquier otro rubro, al igual que por actividades turísticas.
Tan sólo con la recepción de remesas se podría financiar las necesidades externas que tiene el país, explicó Serrano.
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“Es afortunado que existan estas remesas, porque permiten dar sustento a miles de familias, da una fortaleza macroeconómica al país, pero la otra cara de la moneda es que hay millones de personas que se han visto obligadas en las últimas décadas a salir del país por motivos de necesidad, no en condiciones óptimas, porque no hemos logrado como país darle oportunidades laborales a estas personas”, comentó el especialista en conferencia de prensa.
Al presentar el “Anuario de migración y remesas 2021”, elaborado por BBVA México y el Consejo Nacional de Población (Conapo), Serrano detalló que en 2020 las remesas representaron el 3.8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
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En particular, en estados como Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Zacatecas y Nayarit, las remesas representaron más del 10 por ciento del PIB en cada entidad federativa.
La mayor parte del dinero enviado por los connacionales se usó para la compra de bienes duraderos, al igual que para adquirir alimentos y ropa, de acuerdo con el informe.
A futuro, enfatizó Carlos Serrano, el principal reto es darle mayor seguridad a los migrantes, porque en diversas ocasiones pierden la vida tratando de cruzar a Estados Unidos o sufren de robos.
De enero a mayo de 2021, las remesas enviadas al país llegaron a 19 mil 178 millones de dólares, lo que representó un alza anual de 21.75 por ciento y la mayor alza para un mismo periodo desde que se tiene registro en 1995, según Banxico.