Los manifestantes acudieron a la sede central del organismo la mañana de este martes mientras se realizaba una junta del Comité Técnico del Fideicomiso ProMéxico.
Argumentaron que desde el primer día laboral del año ya no se les permitió la entrada pero no se les ha liquidado ni han firmado ningún documento que acredite el fin de su relación laboral.
"Llevamos dos meses sin ser despedidos y sin cobrar un solo pesos. A todos ya nos dieron de baja en el Seguro Social; hay mujeres embarazadas que estaban por programar su incapacidad y otras con niños que ya no tienen servicio de guardería", comentó José Santamarina, uno de los ex empleados.
De acuerdo con Santamarina, hay alrededor de 450 empleados en el país y en las oficinas en el extranjero que fueron despedidos sin un oficio ni liquidación.
Ante esta circunstancia, se han interpuesto entre 150 y 200 denuncias en la Junta de Conciliación y Arbitraje, las cuales se espera vayan en aumento.
Además, los ex trabajadores plantean radicalizar sus protestas ante la falta de atención del director de ProMéxico, Faustino Cruz Hernández, y de las autoridades.
"Hay un grupo que ya se plantea cerrar calles y acudir a manifestarse ante la Secretaría de Economía si esto no avanza. Llevamos cinco reuniones y en todas es lo mismo: no nos dan respuesta, no nos dicen nada", comentó un ex empleado.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador confirmó la desaparición de ProMéxico en sintonía con la política de austeridad, dejando la labor de promoción y atracción de inversiones en manos de las secretarías de Economía y de Relaciones Exteriores.
No obstante, las autoridades no han conformado los términos en los que se extinguirá el organismo ni de la liquidación de los empleados.
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