Kristalina Georgieva, jefa del Fondo Monetario Internacional (FMI) rechazó el haber presionado al personal del Banco Mundial para modificar su informe Doing Business con la finalidad de favorecer a China.
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Este jueves el Banco Mundial anunció que se suspendería inmediatamente dicho informe, al hallar una pesquisa de irregularidades específicamente en las ediciones 2018 y 2020.
Al respecto, Georgieva rechazó la acusación sobre su actuar en el documento Doing Business:
“No estoy de acuerdo fundamentalmente con los hallazgos e interpretaciones de la Investigación de irregularidades en los datos en lo que se refiere a mi papel en el informe Doing Business de 2018 del Banco Mundial”, pronunció en un comunicado.
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Asimismo señaló que ya notificó de lo ocurrido al director del FMI, por lo que espera que la junta multilateral del organismo se reúna para discutir el tema.
*Por su parte Justin Sandefur del Centro para el Desarrollo Global aseguró que se necesita escuchar la versión de los hechos de Kristalina Georgieva para poder tomar una decisión final. No obstante, prevé que el panorama no pinta a su favor.
"El FMI está encargado de monitorear la integridad de los datos macroeconómicos y financieros a nivel internacional, y que su jefa haya estado involucrada en la manipulación de datos es una acusación bastante condenatoria", dijo a la AFP.
Informe Doing Business cambia el ranking de China
Al ser publicado el informe Doing Business, que califica a los países según sus regulaciones comerciales y reformas económicas, Pekín se pronunció molesto por recibir la clasificación en el puesto 78 de la lista de 2017.
Posteriormente el informe de 2018 habría mostrado que China caía aún más en la clasificación sobre cuán fácil es hacer negocios en el país.
El informe era alistado por el personal del Banco Mundial mientras los líderes participaban en las negociaciones para aumentar el capital crediticio, lo cual requería del acuerdo de los principales miembros, incluído China.
En las últimas semanas previas a la publicación del informe en 2017, el entonces presidente del Banco Mundial, Jim Kim se reunió con Georgieva para actualizar la metodología con respecto a China, de acuerdo con la investigación del bufete de abogados WilmerHale.
Kim discutió la clasificación con altos funcionarios chinos que estaban consternados por la baja clasificación del país, y los asesores de Kim plantearon formas de mejorarla, según el resumen de la investigación publicado por el BM.
Se considera que uno de los logros más característicos de Kim fue que lideró un acuerdo para un aumento de 13 mil millones de dólares en los recursos del Banco Mundial.
Para llegar a este trato se requirió del apoyo del entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien se oponía a conceder créditos para China y Pekín a pesar de haber accedido a pagar más intereses por los préstamos.
En medio de presiones de la dirección, el personal cambió algunos de los datos que impulsaron a China siete lugares en la nómina de 2018, hasta el ranking 78, el mismo puesto que el año previo, según la investigación, que analizó 80 mil documentos y entrevistó a más de tres docenas de empleados actuales y anteriores del prestamista.
Georgieva reprendió a un alto funcionario del Banco Mundial por "manejar mal la relación con China y no apreciar la importancia del informe Doing Business para el país", según la investigación.
Tras realizar los cambios, Georgieva agradeció por “hacer su parte por el multilateralismo”. Más tarde llevó a cabo una visita en la casa del funcionario a cargo del informe a fin de recuperar una copia y le agradeció por ayudar a “resolver el problema”
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