El gobierno de Andrés Manuel López Obrador usará 362 millones 872 mil pesos del presupuesto para rehabilitar 132 kilómetros de la vía del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec (FIT), esto como parte de un proyecto que busca contener la migración y sacar de la pobreza a los habitantes de Veracruz y Oaxaca.
“La rehabilitación y modernización es vital y necesaria para sacar de la marginación a esta región del Istmo de Tehuantepec”, señala la Manifestación de Impacto Ambiental que presentó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) el FIT.
Desde finales de 2019, esta empresa ferroviaria con participación mayoritaria del gobierno federal, la Administración Portuaria Integral (API) de Coatzacoalcos y la API de Salina Cruz fueron desincorporadas de la Secretaría de Comunicaciones Transportes (SCT) para integrarse al Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec.
La rehabilitación del tramo creará empleos, ingresos y multiplicará inversiones en Oaxaca y Veracruz, en beneficio de las comunidades afectadas por la pobreza, la violencia y la migración, explica en un análisis la compañía estatal ferroviaria creada el 19 de octubre de 1999.
El objetivo es aumentar la velocidad y desplazamiento de los trenes, disminuir el costo y diversificar la oferta al posibilitar el traslado de carga y pasajeros.
El plan para unir al Golfo de México con el Océano Pacífico a través del Istmo de Tehuantepec data del Tratado de McLane-Ocampo.
“La parte mexicana cedía a perpetuidad, y con toda libertad, los derechos a Estados Unidos para transportar bienes, tropas, pertrechos militares y gente en un tren que debería construirse entre ambos países”, señala el documento al que tuvo acceso El Sol de México .
El tratado, que nunca fue ratificado por EU, definía la geopolítica estadounidense desde Canadá hasta Panamá.
El Istmo de Tehuantepec “se trata de una zona que la Casa Blanca ha visto, desde entonces, como la frontera sur de su área íntima de seguridad nacional”, dice el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec.
En 1894 se inauguró la vía férrea (que en realidad concluyó en 1899) y estuvo en auge hasta el final del régimen de Porfirio Díaz, cuando estalló la Revolución. Cinco años después abrió el Canal de Panamá.
“El conflicto armado convirtió a los ferrocarriles en un codiciado y asediado medio de transporte de las tropas en lucha. Y la apertura del Canal de Panamá abatió la rentabilidad del tren istmeño”, precisa el documento.
Andrés Manuel López Obrador planteó la creación del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, que se propone tenga zonas libres para atraer inversiones, tasas de IVA e ISR disminuidas y combustible a precios bajos.
El plan es que el corredor compita en costos y tiempos con el Canal de Panamá. Los barcos cruzan dicho canal en nueve horas, y además tienen que esperar 10 días para atravesar del El Caribe al Pacífico y viceversa. Se estima que el cruce de carga por el corredor del tren interoceánico tome 10 horas.
“El Istmo de Tehuantepec es una zona estratégica e incongruentemente con áreas de alta marginación y muy bajo desarrollo. La ejecución de este proyecto traerá desarrollo acelerado en esa región al favorecer a los estados de Veracruz y Oaxaca y muy en especial a los municipios por los que atraviesa la ruta y a poblaciones aledañas y cercanas al trazo”.
De acuerdo con el gobierno federal, el 30 y 31 de marzo de 2019 las comunidades zapotecas, mixes, zoques, huaves, chontales, chinantecas, mazatecas, mixtecas, popolucas, náhuatls y afromexicanas avalaron el Corredor Interoceánico.
La rehabilitación y modernización de 132 kilómetros de la vía de ferrocarril terminará en tres años. En un tramo de 63.124 kilómetros del tren se cambiarán “los rieles en mal estado, durmientes, balasto, trabajos de calzado y nivelación de la vía, retiro de construcciones que hayan invadido el derecho de vía, desazolve de alcantarillas, revisión y en su caso cambio o reparación de las estructuras de los puentes, colocación de nuevos señalamientos visuales”. También se rehabilitarán las estaciones de carga, pasaje y mixtas, y se ajustarán las curvas para reducir el riesgo de descarrilamiento