Kansas City Southern (KCS) y Canadian Pacific Railway (CP) celebraron este miércoles un acuerdo de fusión para crear la primera red ferroviaria de una sola línea de 32 mil kilómetros que une a México, Estados Unidos y Canadá.

La empresa canadiense acordó adquirir KCS en una transacción de acciones y efectivo que representa un valor empresarial de aproximadamente 31 mil millones de dólares, lo cual incluye asumir tres mil 800 millones de dólares de deuda pendiente de la ferroviaria estadounidense.

Con este acuerdo se finaliza un proceso que inició en marzo, cuando CP lanzó la primera oferta para comprar a la ferroviaria estadounidense.

Un mes después, su connacional Canadian National Railway realizó una oferta mayor para la compra de KCS, lo que comenzó una guerra de ofertas por uno de los mayores acuerdos de la industria ferroviaria en las últimas décadas.

Finamente, KCS rescindió un acuerdo de fusión con Canada National Railway ya que, informó, la junta directiva consideró que CP podría hacer una mejor oferta y por el temor de que las autoridades regulatorias no autorizaran la transacción.

“Nuestro camino hacia este acuerdo histórico solo refuerza nuestra convicción en esta asociación única en la vida (…) Al combinarnos, desbloquearemos todo el potencial de nuestras redes y nuestra gente mientras brindamos el mejor servicio de la industria para nuestros clientes”, dijo el presidente y director general de CP, Keith Creel.

El directivo añadió que la creación de la primera red ferroviaria de América del Norte brindarán un alcance de mercado drásticamente ampliado para los clientes de CP y KCS y respaldarán el crecimiento económico de la región.