A partir de este jueves 20 de febrero quedará prohibida la importación de cigarros electrónicos, como parte de las acciones del gobierno de México para proteger la salud de los mexicanos, informaron las secretarías de Salud y Economía.
A través de un comunicado, las secretarías recordaron que el comercio de cigarros electrónicos se encuentra prohibido en México desde mayo de 2008, fecha en que se expidió la Ley General para el Control del Tabaco.
Sin embargo, se requería de una "armonización en el marco normativo" a fin de evitar que se llevaran a cabo prácticas de comercio ilegales de dichos productos.
La dependencia explicó que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), los Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (SEAN), mejor conocidos como cigarros electrónicos, y otros dispositivos pueden contener niveles de sustancias tóxicas y compuestos carcinógenos, en ocasiones superiores a los de los cigarros tradicionales.
Además, destacó que los cigarros electrónicos constituyen un riesgo para las personas aunque no los utilicen, ya que el aerosol exhalado por los usuarios de estos dispositivos contienen soluciones y mezclas disueltas con elementos dañinos para el corazón y los pulmones.
Cifras oficiales citadas por la dependencia señalan que unos 938 mil adolescentes en México han probado el cigarrillo electrónico, de los cuales 160 mil lo utilizan de manera habitual.
"Con estas acciones la Cofepris y la SE dan cumplimiento a lo dispuesto por el marco legal vigente, eliminando cualquier posibilidad de que se comercialicen en territorio nacional productos distintos del tabaco", concluyó.
Una medida "autoritaria"
Al respecto, la Asociación Pro Vapeo México advirtió que esta medida del gobierno, a la que calificó de "agresiva" y "autoritaria", dejará vulnerables a aquellas personas que usan vaporizadores en el proceso de dejar de fumar tabaco.
Roberto Sussman, director de la institución e investigador de la UNAM, advirtió que el decreto presidencial que prohíbe la importación de cigarros electrónicos y vaporizadores, entre otros dispositivos similares, será contra producente porque restringirá la disposición de equipos que han demostrado funcionar como una efectiva herramienta para combatir el tabaquismo.
"Lo grave de este tipo de políticas agresivas, autoritarias e impulsivas, basadas en el pánico, es que pueden producir que cientos de miles de personas que ya no fuman vuelvan a fumar; es resultado de una política errónea", afirmó.
Además, alertó que la prohibición fomentará la venta de vaporizadores en el mercado negro, con el riesgo de que proliferen productos de dudosa calidad.