A empresas que participan en la construcción de la refinería de Dos Bocas como Saimpen S.P.A / Sainmexicana S.A. de C.V podrían revocarles el contrato si hallan que hubo actos de corrupción durante su participación en la rehabilitación de la refinería de Tula en Hidalgo, señaló José Salvador de la Mora, titular de control institucional de Pemex.
Entrevistado después de su participación en el Primer Congreso Internacional Compliance. Experiencias en México, organizado por Thomson Reuters, señaló que sigue la línea de presidencia de cero corrupción, por lo que trabaja en establecer controles en cada uno de los procedimientos para "no tener ningún resquicio de corrupción".
Al ser cuestionado sobre si se revocarían contratos a empresas que participaron en la rehabilitación de las refinerías Tula y Cadereyta, y que según la Auditoria Superior de la Federación (ASF) detectó daño al erario público por 285 mdp y aun así se les otorgaron contratos para participar en la construcción de Dos Bocas; el funcionario respondió que habría que ver si hubo corrupción, pero los mismos contratos establecen penalizaciones por incumplimiento.
Y añadió: "uno de los controles que tiene Pemex son las clausulas anticorrupción en los contratos y cualquier proveedor que infrinja las norma de ética se le puede rescindir el contrato sin ninguna responsabilidad para Pemex".
Algunas de las anomalías detectadas por la ASF fue falta de pago en anticipos y falta de sanciones a contratistas por el incumplimiento en trabajos, además de retrasos en la puesta en marcha de las obras.
José Salvador explicó que su trabajo en control interno, no es investigar, "alguien más lo hará", dijo que su labor es saber cómo pasó el ilícito para implementar procesos que impidan que se repita el suceso.
"Los reportes de la ASF es mi insumo, como control interno acompañamos a las áreas cuando las están auditando, no para ver que les encuentran, sino para ver qué cosas podemos implementar y tener control para que no vuelve a pasar".