Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, confirmó que sigue la construcción de la refinería de Dos Bocas, a pesar de que el análisis técnico en manos de la Sener advierte que la obra costará y tardará más del doble de lo previsto.
Según ese documento, el proyecto más ambicioso del sexenio costará entre 15 mil y 17 mil millones de dólares y no ocho mil millones. Además de que tardará hasta seis años, y no tres.
“Se va a construir la refinería con la coordinación, administración y supervisión de Pemex y de la Secretaría de Energía (Sener)”, dijo el mandatario.
“Esto nos va a ayudar a terminarla en tiempo y cumplir nuestra palabra. Es un desafío hacerla en tres años y que nos cueste mucho menos de lo que estiman las empresas”, agregó el fundador de Morena, quien estuvo acompañado de Rocío Nahle García, titular de la Secretaría de Energía y Octavio Romero Oropeza, el director de Pemex.
Como informó El Sol de México, la noche del miércoles el gobierno declaró desierta la licitación por invitación restringida. Las propuestas de los consorcios Bechtel- Techint, Worley Parsons Jacobs, Technip o KBR rebasaban los costos y plazos de construcción de la séptima refinería en Paraíso, Tabasco.
Los técnicos de la obra delinearon cuatro escenarios. Entre estos destacan declarar desierta la convocatoria, un plan para rehabilitar las seis refinerías, y hacer una planta de 100 mil barriles de capacidad que no es rentable.
Las propuestas entregadas por los consorcios extranjeros a la titular de la Sener indican que se requiere una inversión de entre 10 mil y 12 mil millones de dólares para construir la refinería de Dos Bocas, refirió el Presidente en su conferencia matutina. El monto se aleja de los ocho mil millones de dólares que la dependencia calculó como presupuesto máximo.
En cuanto a los plazos, “sólo una (empresa) se comprometía a tener la refinería en el 23 y eso no nos da seguridad. Otra hasta el 25 y no vamos a dejar obras inconclusas en el gobierno”, agregó el exjefe de Gobierno de la Ciudad de México.
La idea de López Obrador es cumplir con el monto de inversión previsto y con el tiempo de edificación de la obra. El mandatario dijo que heredó obras que se iniciaron de manera irresponsable en el gobierno de Enrique Peña Nieto, sin planeación y sin la garantía de recursos.
EN DOS ETAPAS
El análisis técnico presentado esta semana a la secretaria Energía considera también construir la refinería en dos etapas con el objetivo de reducir los costos porque se construirán dos trenes con capacidad para 170 mil barriles diarios cada uno.
Este año inicia la construcción del primero y habrá en el largo plazo una siguiente etapa, de acuerdo con el análisis técnico al que tuvo acceso este diario.
Pemex irá al mercado internacional a comprar los equipos para la refinería cuya entrega se pacta a largo plazo y su costo es mayor. Según el plan, con esto habrá una baja significativa en la inversión.
“Petróleos Mexicanos pone a disposición de esta coordinación a cargo de la secretaria de Energía los recursos financieros, técnicos, humanos y materiales necesarios para cumplir con tal encomienda del Presidente”, expresó Octavio Romero.
“El propósito de esta coordinación es operar con autonomía de gestión y con las facultades necesarias para ejercer de manera eficiente y directa el presupuesto asignado al proyecto, que para el presente año es de 50 mil millones de pesos”, aclaró el encargado de la petrolera mexicana.
Rocío Nahle dijo que el plazo de ejecución será de tres años y la inversión máxima de ocho mil millones de dólares.
“La estrategia de ejecución se diseñó y se ajustó de tal manera que permita optimizar el plazo para cubrir la meta de tres años de construcción y reducir el costo del proyecto, capitalizando hasta 40 por ciento de ahorro sobre los estimados. Esto de los estimados, son estimados de costos que presentaron las diferentes empresas a las que se les invitó”, concluyó Nahle.