La labor del gobierno no es construir, aseguró Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), quien pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador rectificar su decisión respecto a que la refinería de Dos Bocas, en Tabasco, sea construida por Petróleos Mexicanos.
"Ahora en vez de un Gobierno de México, tenemos una constructora de México. Ya se está anunciando que el Ejército hace aeropuertos y ahora que Pemex hace refinerías. Son claras las lecciones en México y en el mundo de que el Gobierno no está para construir", señaló al concluir una reunión de Consejo Nacional del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El líder patronal mencionó además que la refinería en Tabasco puede generar un foco de corrupción e ineficiencia entre amigos de funcionarios.
En este contexto, exhortó al Presidente a que deje de lado la política “me canso ganso” y que escuche los argumentos sobre los riesgos de construir la refinería.
Como lo adelantó El Sol de México, López Obrador confirmó que el proceso de invitación restringida para la construcción de la refinería en Tabasco quedó desierta y que Pemex realizará la obra bajo la coordinación de la Secretaría de Energía. El proyecto tendrá un costo de 160 mil millones de pesos e iniciará el 2 de junio, para concluir en 2022.
Sin embargo, el análisis técnico sobre la obra, el cual publicó este diario, señala que no es posible construir la refinería en tres años, además se prevé un costo entre 15 mil y 17 mil millones de dólares, el doble de lo que anunció el Jefe del Ejecutivo.
El presidente López Obrador tiene en sus manos este análisis donde se recomienda planear una refinería de menor capacidad para alcanzar la inversión inicial proyectada de 8 mil millones de dólares, pero no será rentable. Se sugiere cancelar la obra, frenar la licitación y revisar nuevos proyectos, o gastar el doble de lo planeado y esperar más de seis años para que entre en operación.