“Este primer trimestre nos dio una cachetadita", dijo el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, sobre el débil crecimiento de la economía en ese periodo. "Lo vamos a componer", prometió.
El también encargado del Consejo para el Fomento a la Inversión, el Empleo y el Crecimiento Económico se refirió al reporte del Inegi sobre la caída del PIB de 0.2 por ciento respecto al trimestre previó y un crecimiento magro de 0.2 por ciento si se compara con igual periodo de 2018.
“Si ven los números de enero y febrero fueron muy bien, marzo fue un problema, se juntaron muchas cosas, pero en el gobierno estamos muy optimistas porque sentimos muy fuerte al sector privado, apoyando”, dijo a la prensa antes de presentarse en el 2019 Mexico Investment Ideas Conference.
El riesgo de recesión está descartado. Si bien este año la economía crecerá apenas entre 1.6 y 1.7 por ciento, en el sexenio se alcanzará la meta de cuatro por ciento anual, en promedio.
Romo se desmarcó así de la opinión de analistas privados que recoge el Banco de México (Banxico) en su encuesta mensual, según la cual el país no crecerá por arriba de dos por ciento en la próxima década. "El tiempo hablará”, reviró el funcionario.
Tampoco aceptó que exista desconfianza entre inversionistas nacionales y extranjeros. “Con la gente con la que platico, que son muchos fondos de inversión, y hablamos con muchos del sector privado, siento que están esperando el tiempo para invertir, inclusive más de lo que han invertido”, afirmó minutos antes de reunirse con más de 200 hombres y mujeres de negocios convocados por CreditSuisse.
En el primer año de gobierno, dijo, en cualquier parte del mundo, el sector privado espera a que haya más certidumbre y mejores señales para inyectar capital.
El año pasado México habría captado unos 28 mil millones de dólares de inversión extranjera directa, para este 2019 el gobierno prevé que la cifra sea mayor.
Del clima de violencia en el país, Romo dijo que nadie puede prometer cambios radicales de un día para otro y, al margen de las cifras, lo que importa es lo que se está haciendo para corregir de fondo el problema, pero lleva tiempo.
“No somos lámparas de Aladino, no resolvemos los problemas de un día a otro, ningún problema se resuelve así”, dijo.
Más temprano, el presidente Andrés Manuel López Obrador, indicó que los programas sociales además de generar bienestar entre las comunidades están impulsando la economía nacional. “Todos estos apoyos son alrededor de 300 mil millones de pesos que les están llegando de manera directa a la gente. Se fortalece el consumo, se fortalece el mercado interno. Esto tiene un efecto económico, además de lo social, además de que genera bienestar".