En el Día Internacional de la Sanidad Vegetal, se puso de manifiesto que las plagas y enfermedades de las plantas son responsables de la pérdida de hasta el 40 por ciento de los cultivos alimentarios a nivel mundial. Generan mermas a productos agrícolas por más de 220 mil millones de dólares, que se traducen en incremento en el precio de los alimentos para el consumidor final.
Las plantas constituyen el 80 por ciento de los alimentos, cuyo valor comercial se triplicó en la última década, sobre todo en las economías emergentes, para alcanzar 1.7 billones de dólares. Las plagas y enfermedades de las plantas son una amenaza para la seguridad alimentaria.
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El presidente de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos, A. C. (UMFFAAC), Luis Eduardo González Cepeda así lo expuso en la inauguración del Segundo Foro Internacional Sanidad Vegetal 2023: “´Política pública basada en ciencia”.
En este evento en el que participaron especialistas nacionales e internacionales, destacó que es necesario avanzar hacia una política pública que mantenga la producción de alimentos sanos e inocuos, preservar el medio ambiente y que detone riqueza para abatir la pobreza rural del país.
También mencionó que las plagas de los cultivos repercuten en la disminución de ingresos para el productor, en el decremento del abasto y todo esto provoca un aumento en el costo de la producción y la reducción de la rentabilidad de cultivos, pérdida de empleos y mayor migración hacia las ciudades.
Por tanto, señaló que las normas, esquemas y acciones de sanidad vegetal son fundamentales para impedir una crisis alimentaria y económica en el país, por lo que se deben reforzar los controles que ponen a salvo la gran variedad de cultivos nacionales. Sobre todo los básicos para la alimentación.
Refirió el ingeniero González Cepeda que el 12 de mayo se conmemora el Día Internacional de Sanidad Vegetal, por decisión de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO).
Robos de agroquímicos en carreteras
Y en entrevista, el presidente de la UMFFAAC, señaló que son cuantiosos los daños económicos que la delincuencia organizada ocasiona a la Industria de Protección de Cultivos Agroquímicos.
Tan solo el año pasado los robos alcanzaron un valor de mil 200 millones de pesos, sobre todo en carreteras de los Estados de Puebla y de ahí hacia el sur de la República. También en las de Guanajuato, Jalisco y Michoacán, como las vías de comunicación más peligrosas”.
“La delincuencia organizada ya sabe que los plaguicidas son sustancias necesarias en el campo y es fácil venderlos”, dijo.
También comentó que el problema es que no hay vigilancia en las carreteras. “Afortunadamente ya estamos en reuniones con los mandos de la Guardia Nacional para hacer operativos que permitan de alguna manera reducir los robos”.
Consideró que será difícil eliminar los robos, pero sí reducirlos y poder llegar con estos insumos al agricultor con costos más competitivos.
Entre otros participantes en el Foro el director general de Inocuidad Agroalimentaria, Acuícola y Pesquera, Leandro David Soriano, en representación del director en jefe del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Francisco Javier Calderón.
También Manuel Gerardo Flores, coordinador del Programa de Política Regulatoria para Latinoamérica de la OCDE; Giuseppa Ottimofiore, analista de políticas en la División de Política Regulatoria de la OCDE.
Así como el representante adjunto de la FAO en México, Eduardo Benítez Paulin.
Junto con Gerardo Loya Chávez, director general de la Asociación de Organismos Agrícolas del Sur de Sonora (AOASS), Marte Vega Román, presidente de la Confederación de Asociaciones Agrícolas de Sinaloa (CAADES).
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Y Fernando Haro Encinas, director general del Consejo Nacional Agropecuario y Enrique de la Madrid, líder de opinión y analista político-económico.