Luego de que el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) liderado por Carlos Salazar Lomelín, rechazara el proceso y resultados de la consulta popular sobre la cervecera Constellation Brands, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que suspender la construcción de la planta no ahuyentará las inversiones.
Expresó que lo buscaron los dueños de la empresa porque quieren un acuerdo, "estoy en la mejor disposición de recibirlos, atenderlos, escucharlos y que nos escuchen también a nosotros”, reveló.
En conferencia matutina, el primer mandatario reiteró que fue decisión de la gente, “no vamos a imponer nada. No voy a llevar a la Guardia Nacional para que se instale una planta”, expuso.
Rechazó que la decisión de poner un alto a la construcción de la cervecera se trate de una decisión autoritaria empeñada en destruir las instituciones, como lo aseguró el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Salazar.
Al respecto, el titular del Ejecutivo dijo que "es su opinión, está en su papel, él defiende a ese sector, yo debo defender al pueblo de México”.
Refirió que su relación con Carlos Salazar está bien, “seguimos siendo amigos, pero yo soy el representante del Estado mexicano y represento a todos los mexicanos",finalizó.
Ayer, El Sol de México publicó que la empresa Constellation Brands demandará a México por la cancelación de una inversión por mil 400 millones de dólares en Mexicali.
La decisión basada en una consulta popular “la vamos a pagar todos”, porque Constellation Brands va a demandar, advirtió Carlos Salazar, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
“Ellos están amparados por el Tratado de Libre Comercio, van a demandarnos, van a demandar al país y pedir daños y perjuicios (…) vía los impuestos vamos a tener que pagar esta decisión.
“A la empresa le van a pagar más de los 900 millones de dólares que ya invirtió, porque nos va a acusar de daños y perjuicios. Se va a pagar con el dinero de los mexicanos”, dijo.