El acelerado desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) y la alta demanda de microchips permitieron a Nvidia casi cuadruplicar sus ingresos durante su cuarto trimestre fiscal, que concluyó el 28 de enero de este año.
De acuerdo con su reporte financiero, las utilidades alcanzaron los 22 mil 103 millones de dólares, cifra 3.6 veces mayor a la registrada en el mismo periodo del año previo y un monto récord para la compañía.
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La empresa estadounidense fabrica tarjetas gráficas, procesadores que inicialmente fueron concebidos para las necesidades de los videojuegos, pero después, hace apenas un año, estos componentes se volvieron indispensables para los desarrolladores de modelos de IA generativa como OpenAI, Meta o Google, ya que ofrecen la potencia de cálculo necesaria para gestionar cantidades masivas de datos.
Estas tarjetas gráficas de Nvidia alimentan los servidores de centros de tratamiento de datos, un sector que se convirtió en el principal cliente del grupo, con una facturación trimestral que se cuadruplicó en un año.
“La computación acelerada y la IA generativa han llegado a un punto de inflexión. La demanda está aumentando en todo el mundo en empresas, industrias y países”, afirmó Jensen Huang, fundador y director ejecutivo de Nvidia. En su reporte financiero, la empresa dijo que se convirtió en una enorme plataforma de PC para la IA generativa, la cual es disfrutada por cien millones de usuarios, entre jugadores y creadores.
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Para el año fiscal 2023, los ingresos de la compañía aumentaron 126 por ciento para totalizar 60 mil 900 millones de dólares. Huang apuntó que la plataforma de centro de datos de Nvidia está impulsada por factores cada vez más diversos como la demanda de procesamiento de datos, capacitación e inferencia por parte de grandes proveedores de servicios en la nube, así como de empresas de software empresarial y de Internet para consumidores.
Asimismo, destacó que hay industrias verticales encabezadas por la automotriz, los servicios financieros y la atención sanitaria, que alcanzan ahora un nivel multimillonario.
“El próximo año traerá importantes ciclos de nuevos productos con innovaciones excepcionales que ayudarán a impulsar nuestra industria”, concluyó el directivo.
León Felipe Sánchez, abogado especialista en Propiedad Intelectual y socio de Fulton&Fulton Abogados, apuntó que en la medida en que la IA evolucione va a requerir de mayor poder de procesamiento, por lo que empresas dedicadas a la fabricación de procesadores, como Nvidia, van a tener un mejor panorama de negocios.
“Nvidia saltó al estrellato por presentar su reporte con ganancias extraordinarias, además de que lleva tiempo siendo de las marcas preferidas para este tipo de procesamiento, pero seguramente van a brincar también compañías como AMD, Intel y otras que participan en este mercado. Incluso, no descarto que Apple incursione en algún tipo de experimento de procesamiento de alto poder”, comentó el especialista a este diario.
Pero esta demanda de procesamiento para la IA enfrenta retos importantes. De acuerdo con Sánchez se trata principalmente de encontrar la fórmula para mantener esta tecnología en un precio asequible y no se quede en manos de unas cuantas compañías con poder económico, como Google y Microsoft, así como el tema de la regulación.
“El gran reto será encontrar la fórmula para que el poder del procesamiento se mantenga en un precio asequible, que no se salga de los márgenes para que sean pocas personas que tengan acceso a este y se convierta en una barrera de mercado para que nuevos jugadores puedan entrar al campo de la IA generativa”, expuso.
El abogado añadió que otro de los retos que puede ser un parteaguas para que la IA termine de despegar o se quede en un intento fallido es el de los temas regulatorios.
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Fabiana Ramírez Cuenca, investigadora de Seguridad Informática de ESET,dijo previamente a este diario, que no hay un país que tenga una legislación capaz de afrontar los problemas que implica esta tecnología.
En México existe el proyecto de Ley para la Regulación Ética de la Inteligencia Artificial y la Robótica, que prevé la creación de un Consejo Mexicano de Ética, la promoción de derechos humanos y protección de datos, así como la prohibición del uso de esta herramienta para la manipulación social. “Yo creo que va a haber un tema sobre cómo se debe regular esta tecnología y esto va a incidir en la forma en que se desarrolle en adelante la IA”, dijo Sánchez.