Hoy en día han llevado a otro nivel ser cosplayer y crear los cosplays, y en Latinoamérica no nos quedamos atrás y para muestra de ello platicamos con Valentina Kryp, quien nos deja más en claro lo que es hacer este arte y ser una de las mejores en ello.
¿Cuantó te tomó todo este proyecto de Motoko?
Debería decir que más o menos entre una semana y 10 días; yo creo que 10 días probablemente, sin contar obviamente lo que fue las fotos, la edición y eso. Eso sí se demora siempre un poco más; como que no lo cuento dentro de lo que es la confección y el proceso del preparado del traje.
¿Más o menos eso es lo que se llevan otros proyectos o este fue más rápido?
No, en realidad éste fue mucho más rápido, pero hay ciertos proyectos que vienen con mucho más tiempo, lo cual es genial, pero más o menos es lo que se suele manejar. Por ejemplo, entre que confirman una comisión y me dicen: ‘sí, sí,’, vamos adelante con esto, o más o menos, entre que se terminan como de barajar las cosas y así se toman como unos 15 días promedio.
¿Qué opinas que se le dé este impulso a un personaje tan icónico en un videojuego donde muchas chicas también lo juegan?
Me encanta. O sea, realmente me encanta esta decisión porque también nos acerca un poco a animes súper retros y que eran de hace bastante porque de hecho “Ghost in the Shell” es justamente una de mis películas favoritas, me encanta y me fascina también que la puedan introducir a ella, que es un personaje muy bien construido, muy fuerte. Es justamente un personaje que puede animar incluso a gente que no tiene idea del cosplay a visualmente sentirse atraídos por ella y eventualmente decir: ‘Bueno, a ver, me gustaría hacer un cosplay, quisiera probar’, y siento que poner personajes así icónicos y de llamativos es realmente traer público nuevo, como ir haciendo una mezcla de: ‘bueno, yo soy muy fan de Ghost in the Shell, a mi me gusta muchísimo como él… ¡fusión!’, me encanta cuando suceden estas cosas porque sugiere un trayecto de gente que realmente es muy interesante.
¿Qué le aconsejarías a la gente que tal vez está pensando en adentrarse en este mundo y que no sabe cómo empezar? ¿Qué se necesita principalmente?
Bueno, yo lo que creo que primero, principal lo que se necesitan son ganas de divertirse porque realmente, la ley primera de cosplay es pasarla bien, es poder disfrutar del personaje, de sentirse parte de algo también, porque de repente ser cosplayer es justamente estar ahí, en el ojo del huracán de un fandom. Yo, en todos los fandoms en los que he estado por ejemplo así de juegos, siempre me he sentido atraída por personajes. Inconscientemente siempre estoy viendo qué podría usar para este traje, cómo podría llevarlo a cabo. Cada vez que surge algo así es de mi interés.
Lo que yo sugeriría yendo un poco más al grano es que, lo primero, lo principal, es que lo intenten. No importa si de repente es un traje muy importante. Lo importante es pasar por la experiencia, interpretarlo, personificarlo. No hace falta tener el mejor traje, los mejores props, los mejores recursos; incluso se puede hacer mucho con muy poco y realmente los invito a que participen, realmente el cosplay es un hobby muy lindo, es algo que a mí me hace muy feliz, siempre me gustó. Incluso hoy por hoy que lo tengo más profesionalizado, sigue siendo algo que me hace muy feliz independientemente si sean comisiones o no y también les diría que lo hagan con amigos. Hacer cosplay junto con amigos es aún más divertido.
A los latinoamericanos nos reconocen en el mundo porque tenemos mucha inventiva. No tenemos el mejor disfraz o la mejor tela o los mejores props pero nos las ingeniamos. ¿Hay algo que hayas resuelto así en tus inicios que a lo mejor no tenías todo esto pero usaste otra cosa; cómo te las ingeniabas para hacerlo, sobre todo cuando empezabas que no tenías comisiones?
Eso es totalmente cierto. Nosotros acá como latinos, siempre tenemos que arreglarnos, a ver qué se consigue. Muchas veces me toca por ahí decir: ‘Bueno, ¿cómo puedo hacer esto?’. Yo misma busco tutoriales en YouTube para ver. Eso es lo bueno de poder iniciarse en el cosplay: hay muchísima información y hay muchísimo tutorial para poder apoyarse que antes no había tanto, realmente eran dos o tres tutoriales lo que tenías y adiós. En su momento siempre trataba de reciclar cosas. ¿Qué quiere decir esto? Tenía un traje que ya no usaba más, (y decía) ‘esto lo puedo sacar de acá, lo puedo poner acá’. Siempre los trajes se han ido reciclando cuando no había tantos recursos obviamente y también, más allá de tener o no recursos, muchas veces, por más que uno tenga presupuesto para destinarlo al traje, a veces no se consiguen cosas que uno dirá: ‘Uy no, qué bien esta tela, qué bien este material’. Lo que yo sugiero mucho es tratar de utilizar el recurso que uno tiene acá, explotarlo al máximo y tratar de ir puliendo la técnica. Muchas veces, como no tenemos tantos recursos, quizás es bueno pulir cierta técnica para poder hacer todo de ahí. Por ejemplo, la goma EVA (Etileno Vinil Acetato). La mejor amiga del cosplayer. De hecho, se puede hacer de todo de goma EVA, prácticamente. Y yo creo que realmente lo he exprimido un montón. Realmente siento que el material más importante es la goma EVA y la tela a veces quizás no es la mejor tela del mundo pero muchas veces se puede improvisar y se puede utilizar distintos tipos de tela por más que no sean los mejores, como para darle un toque más lindo al traje, como para que se vea un poco más completo.
¿Esta goma que dices es como hule espuma o qué es esta goma?
Sería foami.
Con eso puedes subsanar muchas creaciones, ¿no? Sí, totalmente. De hecho, hay un montón de cosas que están hechas desde cero de lo que es foamy y es lo mejor que me pasó.
El circuito más grande para los cosplayers es la Comi-Con. Aparte de éste, ¿dónde más pueden mostrar sus creaciones? ¿Cuáles dirías que son los circuitos más importantes?
Hoy por hoy, en mi visión, lo que me ha ayudado a mí, son las redes. Las redes sociales para mí son lo más importante. También tener un nombre, darse a conocer. Bueno, lo digo en el sentido profesional. Muchas veces la gente simplemente quiere ir y pasar un buen momento o compartir con más público y más fans y eso sí está buenísimo para hacerlo de manera más presencial, que sea un poquito más real. Siempre sugiero eventos como Comic-Con, así súper masivos, también recomiendo mucho todo lo que son eventos de juegos, que los eventos de juegos de repente atraen a mucho público, que son hoy por hoy los que más lapean en mi visión y lo que sugiero mucho es que siempre muestren su trabajo en redes. ¿Qué quiere decir esto? Muchas veces uno hace un retraje, pero se olvida de ese lado, se olvida de promocionar su propio trabajo ahí y considero que es muy importante para poder generar una visión y poder generar una proyección también de lo que es el traje, de lo que es su talento como cosplayer, que de repente hay mucho cosplayer que por ahí puede variar: quizás no tiene el mejor traje del mundo, pero como: digo hoy por hoy se puede hacer contenido literalmente con el teléfono. Simplemente agarras el teléfono, abres TikTok y ya tienes un montón de audios para poder hacer, para poder interpretar. De repente hay cosplayers que quizás se ponen solo una peluca y un traje así nomás y de repente lapean y dices: ‘Wow!, este cosplayer es muy carismático, muy expresivo’. Yo creo que hay gente que tiene un don, una chispa, un carisma por así decirlo, y realmente no es necesario que tengan el traje más grande. Tampoco hace falta que tengan el mejor carisma del mundo; a veces puede venir de otro lado. Considero que el cosplayer tiene todo un espectro enorme para poder explotar al máximo el potencial.
¿Crees que con la pandemia se exacerbó más que puedas usar tu contenido en redes porque se cerraron muchas expos, se cerraron muchos espacios donde generalmente ibas a mostrar o a competir incluso? Ahora se cerraron varios espacios y lo que quedó fue esta parte de las redes...
Sí, totalmente. De hecho, fue muy gracioso porque yo justamente me había comprado todas mis cosas para poder “stremear”. Siempre tuve acercamiento con Twitch desde 2016 más o menos, hace un montón y de repente me encontré en una situación en la que dije: ‘Bueno, habrá que aprovechar’, y justamente paré de hacer tanto cosplay porque obviamente no se podía en lo que era abril-mayo 2020 salir a esas sesiones; entonces me apoyé muchísimo en todo lo que era streaming y también suelo hacer escenas en vivo con cosplay o stream con cosplay y la gente se anima mucho con estas cosas porque son actividades que dices: ‘Bueno, no hay más presencialidad, listo, vamos al stream’. Yo creo que por ese lado también pude continuar haciendo mis actividades de cosplay, no es como que quedaron completamente de lado; simplemente me empecé a apoyar mucho en stream y la gente empezó a coparse mucho con eso y dije: ‘Bueno, aquí es’.
¿Hay proyectos que no aceptarías? Es decir, hay cosas que dices no, sabes qué, esto no
De momento, no. Afortunadamente todo lo que se me ha ido presentando hasta ahora me ha resultado interesante, porque en general siempre tengo bastante afinidad con todo lo que son personajes icónicos como por ejemplo Motoko, que a mí me encantó. Fue como ‘Wow’ porque siempre quise hacer cosplay de ella y en general a veces no tengo tiempo o surgen otros proyectos o de repente se aplaza por x cosa, y que me trajeran esta producción a mí me encantó. Creo que al día de la fecha es de mis favoritas.
Cuéntanos cómo empezó este gusto por el Cosplay y cómo llegaste a estas producciones impresionantes que vemos en tus fotografías…
Yo creo que empezó como cualquier fan en realidad: yo siempre fui muy afín a todo lo que es los juegos, el anime, las series sobre todo, pero también el “cos”que viene mucho de ese lado y siento que de repente lo encontré un día en las redes dando vueltas; siempre estuve metida en una página que se llamaba DeviantArt, sigue estando, pero en su momento era muy popular porque había muchos ilustradores y artistas que subían sus obras y de repente un día estaba buscando mucho material de cosas que a mí me gustaran, como “Dragon Ball”, “InuYasha”, que eran animes muy del momento y dije: ‘Qué pasa si me pongo a buscar, a ver a dónde llego en este buscador. Y encontré de repente gente que estaba haciendo el cosplay y dije: ‘Pero, ¿qué es esto? ¿es una película?’. Fue mi primer acercamiento al cosplay y yo no lo podía creer. Dije: ‘¿Qué es esto? No sé qué es pero lo quiero hacer’. Era como así como completamente de la nada y yo creo que ahí empezó mi pasión por el cosplay; a nivel visual siempre me atrajo, me gustó porque combina muchos factores como el maquillaje, la interpretación, el gusto justamente. Yo siento que ser cosplayer es el mayor tributo que puedes realizarle a algo que amas.
¿Cómo pasas de crear tu primer cosplay o tu primera indumentaria? ¿Cuál fue el primer personaje que realizaste, te apoyaste con alguien, cómo fue esa primera producción para ti?
Bueno, la primera producción yo arranqué y no tenía idea de nada; era: cómo se hace esto, cómo tengo que confeccionar mis trajes. Yo soy una persona muy afín a todo lo que es armadura, así que soy cien por ciento team prop, pero todo lo que es confección, en este caso el traje de “Motoko” fue confeccionado justamente por Cecilia Gómez. Es una colega mía con la que hemos trabajado anteriormente. No me ocupo solamente de lo que es cosplay; me ocupo de lo que es stream, de lo que es producción; todo lo que es la idea, todo lo que es el concepto de una producción viene de mi cabeza. Entonces tengo que estar pensando en eso, tengo que estar pensando en qué quiero que haga el fotógrafo, qué quiero que haga el videógrafo, quiero armar un mundo justamente alrededor de mis producciones. Que la gente, cuando vea el cosplay no diga simplemente: “¡Ah, qué buen cosplay!”, no. Que lo vean y se transporten automáticamente a lo que está pasando en el universo del personaje.
Entonces, como te decía, ese cosplay lo realizó ella, todo lo que es el traje; yo me encargué de los accesorios y la peluca también la hizo una colega mía que se encarga de mis pelucas y de todo eso. Yo creo que la primera vez que sentí como interés, de decir: ‘Tengo ganas de hacer esto’ habrá sido allá por mediados de 2016 hasta 2018 que me acuerdo que incluso competí en muchos circuitos de cosplay que me gustaban, que realmente te exigían una fecha de entrega y ahí fue cuando empecé a practicar todo lo que es el manejo de los tiempos, porque obviamente a veces vienen y te dicen: ‘Hola, ¿cómo estás? Mira, nos interesa comisionarte un cosplay. ¿Lo puedes tener para… mañana?’ Y es como: ‘ahhhhh’. Así que de repente es como… justamente. Y todo lo que es la velocidad con la que piden las cosas o la velocidad con la que tengo que terminar determinados proyectos es como muy insano.
¿Vas a tener alguna aparición, algo donde la gente que se está acercando al cosplay te pueda ver, pueda ser tu trabajo?
Sí, por supuesto. En general estoy teniendo muchos eventos internacionales, lo cual agradezco mucho, es buenísimo. Hace poco estuve en Anime Expo en Los Ángeles, que fue la primera vez que estuve en un evento allá. Sería la segunda vez, pero en realidad para mí es la primera vez en un evento tan masivo: estuve en la premier de Arcane y después me empezaron a invitar a muchos eventos acá alrededor del país también, estuve en Bolivia, en México. Espero próximamente poder seguir visitando otros destinos porque también he visitado muchísimo, antes de pandemia siempre me han invitado a todos lados. Me encanta compartirlos con la gente, me encanta como me llevan a eventos de afuera porque justamente uno puede como romper de repente con eso de estar atrás de las redes, que sea algo un poco más orgánico, más real. Hoy por hoy creo que tengo más eventos en camino, pero todos son acá alrededor. De momento no tengo nada internacional.
Nota publicada en La Voz de la Frontera