La inteligencia artificial (IA) sigue remodelando varias industrias, entre ellas la de la pornografía. Los avances en el aprendizaje automático y los algoritmos de IA para la producción de imágenes y videos han contribuido al crecimiento de los sitios web de porno generado con esta tecnología.
Si bien esta vertiente puede ofrecer una cantidad sin precedentes de estímulos sexuales personalizables y adaptados a las preferencias de los usuarios y al mismo tiempo reducir drásticamente los costos de producción, también genera importantes implicaciones éticas y sociales.
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Por un lado, estas nuevas herramientas permiten a los creadores de contenido producir contenido erótico diverso y permitir un acceso generalizado a estímulos sexuales personalizados que satisfacen las necesidades y deseos de las personas, mejorando así su vida sexual y su bienestar.
Los usuarios pueden verse gradualmente arrastrados hacia un mundo donde sus deseos se satisfacen continuamente, lo que aumenta los riesgos de dependencia o aislamiento social
Pero por el otro, esto podría conducir a un uso excesivo y problemático de la pornografía, a la difusión de deepfakes y a la producción de contenidos ilegales, como la pornografía infantil.
El porno con IA también tiene implicaciones laborales y podría crear problemas de derechos de autor, así como afectar los trabajos de las trabajadoras sexuales y los creadores de contenido para adultos.
Con toda probabilidad, el impacto del fake porno tendrá más matices: algunos usuarios se beneficiarán, mientras que otros pueden verse afectados negativamente. Sin embargo, el ritmo de los avances tecnológicos deja poco tiempo para planificar e investigar cómo integrar armoniosamente esta nueva tecnología en nuestras vidas. Como en muchos otros sectores, no estamos preparados para la pornografía con IA.
Porno personalizable
De manera similar a los orígenes de la industria en las revistas, el contenido para adultos generado por IA comenzó con imágenes. Tanto la historia como las tendencias tecnológicas actuales indican que la próxima etapa de la producción erótica será más sofisticada y complicada.
Actualmente ya existen más de 50 sitios web gratuitos que ofrecen porno con IA, y este número no hará más que aumentar. Sitios web como Candy, Lustlab y Pornify permiten a los usuarios diseñar personajes de IA según sus propias preferencias, haciendo realidad sus fantasías.
Los usuarios pueden generar imágenes escribiendo mensajes de texto o seleccionando características específicas, como edad, género, peinado, origen étnico y otros atributos corporales. También pueden seleccionar ropa, posiciones, ubicaciones, comportamientos y expresiones faciales, así como optar por personajes realistas o animados.
Esto permite una inmensa diversidad en términos de imágenes y personajes que se pueden generar. Sin embargo, como era de esperar, la mayoría del contenido presenta mujeres y cuerpos femeninos.
La IA cambiará la industria para adultos y pronto se conocerá su impacto en nuestra intimidad y sexualidad
Tecnología sofisticada
Además de las imágenes, algunos sitios ahora también ofrecen la opción de generar vídeos cortos en bucle. Estos clips suelen presentar una breve secuencia repetida de una acción específica. A pesar de sus humildes comienzos, estos clips insinúan el futuro del porno con IA: vídeos pornográficos largos, complejos y totalmente personalizables generados por IA creados por profesionales, legos o las propias IA.
Ya existen generadores de texto a video más complejos, sin embargo, el lanzamiento anticipado del modelo Sora de OpenAI sugiere un progreso significativo en la generación de texto a video, concretamente en su alto nivel de realismo, creación de escenas complejas y duración de video inigualable.
Si bien Sora restringirá su uso, prohibiendo a los usuarios generar contenido sexual en la plataforma, esta tecnología subyacente eventualmente llegará a los videos pornográficos generados por IA.
Más allá de las imágenes y los vídeos, varios sitios también permiten a los usuarios interactuar con un chatbot sexual para conversar. Los usuarios pueden personalizar su propio chatbot de IA, especificando rasgos de personalidad, apariencia y preferencias.
Cuando un usuario crea una cuenta, el sitio mantiene un registro de conversaciones anteriores para facilitar la interacción continua. A través de ese diálogo sostenido, la IA puede proporcionar imágenes personalizadas o incluso realizar llamadas de voz confidenciales.
Con el auge de los entornos de realidad virtual y aumentada, podemos anticipar que el fake porno brindará experiencias cada vez más inmersivas
Este marco está diseñado para ofrecer una mejor compañía y elevar la experiencia de una pareja romántica o sexual, insinuando, una vez más, el futuro del porno: uno en el que se combina con compañeros artificiales.
Con el auge de los entornos de realidad virtual y aumentada, también podemos anticipar que, al igual que ocurre con la pornografía actual, la pornografía con IA pronto brindará experiencias cada vez más inmersivas.
Beneficios y preocupaciones
La llegada de la pornografía con IA plantea varias preocupaciones. Por un lado, la naturaleza altamente personalizable e inmersiva de la pornografía con IA podría reforzar comportamientos compulsivos. Los usuarios pueden verse gradualmente arrastrados hacia un mundo donde sus deseos se satisfacen continuamente, lo que aumenta los riesgos de dependencia o aislamiento social.
La reciente creación y difusión de deepfakes pornográficos de Taylor Swift destacó la cuestión del consentimiento y el contenido sexual explícito generado por IA. Los estudios indican que aproximadamente el 98 por ciento de los videos deepfake que se encuentran en línea son de naturaleza pornográfica, siendo las mujeres los objetivos predominantes en casi todos los casos.
La pornografía con IA también podría poner en peligro los medios de vida de las trabajadoras sexuales y los creadores de contenido para adultos, planteando riesgos tangibles para que los artistas pierdan tracción e ingresos a medida que compiten gradualmente con la avalancha de contenido generado por IA.
Los creadores de pornografía con IA también podrían utilizar la tecnología para producir otros contenidos ilegales, como pornografía infantil.
98 por ciento de los videos deepfake que hay en línea son porno, siendo las mujeres los objetivos predominantes
Por el contrario, la pornografía con IA podría utilizarse para mejorar el placer sexual. Los individuos pueden materializar sus fantasías más profundas con sólo unos cuantos clics.
También podría emplearse en la investigación sexual para obtener una comprensión más profunda de la profundidad de los deseos y fantasías humanos y proporcionar estímulos seguros, estandarizados e interactivos durante los experimentos. La pornografía con IA se puede utilizar en la educación para mostrar la diversidad de cuerpos y preferencias.
La pornografía con IA tiene aplicaciones en terapia, donde puede ofrecer estímulos adaptados para evaluar y tratar miedos o disfunciones sexuales basadas en la ansiedad, por ejemplo, mediante la exposición a contenidos sexuales progresivamente más intensos.
Además, la pornografía con IA también podría servir como una herramienta para que las personas aprendan a tener relaciones sexuales y románticas saludables. Finalmente, la IA podría proporcionar a los creadores de contenido para adultos herramientas para hacer crecer su negocio.
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El futuro del porno
Si bien se podrían implementar leyes basadas en evidencia para mitigar los riesgos asociados con el contenido sexualmente explícito generado por IA, sería fundamental educar a los usuarios y creadores sobre su sexualidad y la práctica del consentimiento. También se necesita más investigación para comprender la influencia de esta tecnología y guiar su desarrollo.
La IA cambiará la industria para adultos y pronto se conocerá su impacto en nuestra intimidad y sexualidad.
* Traducción de El Sol de México.
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