Los cinco agregados diplomáticos que integrará Estados Unidos en su Embajada de México no tienen funciones de inspectores laborales, aseguró Robert Lighthizer, representante Comercial de Washington.
En una carta enviada al subsecretario para América del Norte de la Cancillería, Jesús Seade, el funcionario estadounidense aseguró que es un proceso “típico” que su gobierno tenga agregados en las principales capitales extranjeras, como ocurre en México.
La carta fue enviada después de que ambos funcionarios sostuvieron una reunión en la oficina de la Representación Comercial de Estados Unidos en Washington.
El domingo, Seade dijo que el Tratado entre México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) "no tiene letras chiquitas" y que es un "acuerdo 100 por ciento público". En su cuenta de Twitter, admitió que desconoce la función exacta de los “agregados diplomáticos”, por lo que solicitó una cita con Lighthizer en Washington, misma que inició este lunes a las 11:00 horas y duró una hora.
El funcionario de la Cancillería asistió a la reunión con Robert Lighthizer acompañado de su asesora, Olga Martínez, pero sin ningún representante de la Secretaría de Economía (SE), según informó esta última dependencia a El Sol de México.
En la carta, Lighthizer señaló que los agregados proceden de más de una docena de agencias federales, incluidos los departamentos de Agricultura, Comercio, Defensa, Tesorería y Justicia.
“El gobierno de EU ha albergado personal en varias embajadas de todo el mundo, incluso en México, para ayudar a los gobiernos extranjeros a mejorar las condiciones de trabajo”, detalló el representante de Estados Unidos”, añadió en la misiva.
Lighthizer recordó que México también tiene agregados diplomáticos en Estados Unidos de secretarías como Gobernación, Defensa Nacional, Seguridad y Protección Ciudadana, Economía, así como de la Fiscalía General, el SAT y la Unidad de Inteligencia Financiera.
Añadió que en el Tratado entre México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC) autoriza hasta cinco agregados del Departamento de Trabajo para trabajar con sus contrapartes, trabajadores y grupos de la sociedad civil mexicanos en la implementación de la reforma laboral, incluso mediante la prestación de asistencia técnica y el desembolso de fondos para el desarrollo de capacidades y brindar asistencia al nuevo comité laboral interagencial del gobierno de Estados Unidos.
Pero aclaró que el personal no realizará funciones de “inspectores de trabajo” y acatará las leyes mexicanas vigentes.
El funcionario estadounidense recordó que el mecanismo de respuesta rápida del T-MEC permite que un panel independiente compuesto por tres especialistas, elegidos por ambas partes, solicite verificaciones "in situ"(en su sitio), en cualquiera de los tres países cuando haya quejas de buena fe, en las que cuestionen si se les niegan derechos laborales clave a los trabajadores. Pero esas verificaciones serán realizadas por panelistas independientes, no por los agregados laborales.