Wall Street cerró este miércoles en rojo y no pudo mantener las ganancias cosechadas en la sesión del martes ni en el inicio de la de hoy, que aportaron alivio a los mercados tras las preocupantes pérdidas registradas el lunes con ventas masivas.

El Dow Jones de Industriales terminó con una caída del 0.60 por ciento, hasta los 38.763 puntos, mientras que el selectivo S&P 500 (-0.77 por ciento,) y el tecnológico Nasdaq (-1.05 por ciento,) también se movieron en dirección negativa hasta las 5.199 y 16.195 unidades, respectivamente.

Dos jornadas atrás, el Dow Jones y el S&P 500 experimentaron sus peores sesiones desde septiembre de 2022, con desplomes del 2.6 por ciento, y el 3 por ciento, respectivamente, y el Nasdaq se precipitó otro 3.4 por ciento, debido a las preocupaciones por una posible recesión.

Ese mismo día, el caos también se desató en las principales bolsas asiáticas, con el Nikkei -índice de referencia de Japón- sufriendo una pérdida del 12.4 por ciento (su peor jornada desde 1987), entre otros mercados.

Tras una apertura en positivo hoy, cerraron en rojo grandes valores tecnológicos como Nvidia (-5 por ciento); Meta (-1,05 por ciento) y Tesla (-4,4 por ciento), que vieron limitado el impulso tomado ayer.

La peor parte entre las tecnológicas estadounidenses se la llevó este miércoles el proveedor de servidores informáticos Super Micro Computer, que se hundió más de un 20 por ciento, después de que los resultados de su último trimestre fiscal no llegaran a las estimaciones esbozadas por los analistas.

El índice de volatilidad Vix, conocido como el "indicador del miedo" de Wall Street, se situó en 28 puntos aproximadamente tras dispararse hasta 65 el lunes, indicando así que los temores de los inversores a una posible recesión han remitido.

Sin embargo, el consejero delegado de JPMorgan Chase, Jamie Dimon, dijo el miércoles en una entrevista con la cadena CNBC que sigue creyendo que las probabilidades de un "aterrizaje suave" para la economía estadounidense se sitúan ahora entre el 35 por ciento, y el 40 por ciento,, lo que hace que, en su opinión, la recesión sea el escenario más probable.

"Siempre he señalado que la geopolítica, la vivienda, los déficits, el gasto, el endurecimiento cuantitativo y las elecciones causan cierta convulsión en los mercados", argumentó Dimon.

Además, según Quincy Krosby, estratega global jefe de LPL Financial, es probable que aún se avecinen tiempos tumultuosos: "Se espera que continúen los focos de volatilidad en agosto y septiembre", indicó.

En cuanto a los sectores, la sesión de este miércoles en Wall Street concluyó con ganancias para el de servicios públicos (0.55 por ciento) y para el energético (0.46 por ciento) principalmente; con las mayores pérdidas recayendo sobre el de bienes no esenciales (-1.4 por ciento), materias primas (-1.3 por ciento) y el tecnológico (-1.22 por ciento).

Entre las 30 mayores cotizadas del Dow, destacaron los avances de Apple (1.25 por ciento), Merch (1.21 por ciento) y Procter & Gamble (1.15 por ciento), y el importante retroceso de Amgen (-5 por ciento), Disney (-4.43 por ciento), Intel (-3.63 por ciento) y Home Depot (-3.23 por ciento).

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En otros mercados, el petróleo de Texas subió a 75.23 dólares el barril; los rendimientos del bono del Tesoro a 10 años ascendían a 3,955 por ciento; el oro caía a 2.423 dólares la onza; y el euro se cambiaba a 1,09218 dólares.