A Benny Ibarra el teatro y la música le han fortalecido el “músculo de la sensibilidad”, así lo menciona él mismo, quien a través de su personaje Max Tooney en la obra de Novecento, ha navegado por el mar Atlántico ida y vuelta incontables veces, además de interpretar múltiples personajes.
“El narrador va viviendo las anécdotas, le roba la identidad a los personajes para crear una propia y eso es lo bonito y especial en esta obra. Es interesante que como narrador puedo entrar y salir del cuerpo y de la vibra de cada uno de los personajes y vivir intensamente sus historias para después darles una distancia de objetividad, ese baile lo hace más interesante”, cuenta el cantante y actor en entrevista para El Sol de México.
En solitario, Benny Ibarra enfrenta su mayor desafío en Novecento
La obra se estrenó en octubre de este año con una temporada de dos meses, y logró regresar a la cartelera a principios de este mes para culminar las presentaciones el 29 de diciembre, desde entonces, el avance que ha obtenido en el monólogo, desde su propia perspectiva ha sido brutal.
“He ido profundizando en las diferentes analogías de Baricco (autor), ahora voy entendiendo las escenas de manera más liquida, ya es un viaje desde la primera palabra hasta la última, le entiendo y puedo transmitir la historia de principio a fin. Histriónicamente te elevas y el salto cada vez es más grande y llegas hasta el final para que haya fluidez”, cuenta.
Así, su personaje, Max Tooney narra la relación espiritual que lo conecta con la música de su amigo y pianista del barco, en un una noche de vívidos recuerdos . “La gran musa de esta obra es la música, cada vez que el narrador se acuerda de cómo tocaba Novecento había una relación espiritual con la música y creo que le estoy entendiendo cada vez más” explica.
Además, la obra se ha metido más en su propio quehacer artístico, pues esa relación que encuentra entre los dos amigos y la obra, es la misma que él ha sentido “con mi propia música, creo que eso es parte de mi chamba tener esa sensibilidad como artista y absorber esa energías cuando voy a ver a otros”.
Benny disfruta su trabajo como actor, “hay algo en el teatro que siempre queda inconcluso, que por más que des funciones siempre tienes ganas de conocer a tu personaje más”, sin embargo está consciente de que lleva 10 años sin sacar un disco por lo que anuncia que pronto comenzará a trabajar en uno.
“Ya no se estila hacer discos pero sigo peleándome con la idea de que hay que hacerlos, el arte del disco era tan hermoso, es raro que ahora saquen un capitulo de un libro, pero voy a hacer cine, un doblaje para Trolls 2 y hay otro proyecto del que no puedo decir nada aún”.