POR JAVA El músico chihuahuense Tino Contreras, orgullomexicano, cumplió 93 años de edad el pasado 3 de abril y,sorprendentemente, sigue tocando la batería de una maneraformidable, vigoroso el hombre, lleno de música, repleto de vida,incansable, con el don divino de la creatividad que lo haconvertido sencillamente en un genio.
Y tan activo. Son las dos de la mañana o la hora que sea demadrugada y se despierta revoloteándole en la cabeza las notasmusicales. Soñaba en ese momento una melodía, se levanta raudo ygrabadora en mano corre hacia el piano. El lápiz y el papelpautado están listos. Más tarde ha creado una nueva pieza queincluirá en su próximo disco.
No para. Vive día y noche con la música en el alma y así hasido siempre desde que entendió que la música sería su camino,desde que papá le heredó y le inculcó la venilla musical. Era unchiquillo entonces allá en su natal Ciudad Juárez.
Hoy, a los 93 años de edad, no dudamos en afirmar que TinoContreras es el jazzista más importante de nuestro país, prodigiode vida y dueño de una brillante carrera artística que lo hallevado a tocar en los escenarios más importantes del mundo.
Aclamado en Grecia, en Turquía y en Francia, ahora se dispone apresentarse el próximo 30 de abril en la sala Manuel M. Ponce delPalacio de las Bellas Artes, conmemorando el Día Mundial del Jazz,en un concierto en el que estará acompañado por su sexteto.
Basta verlo. Es maravilloso. Porque además toca el piano, latrompeta y canta. Y su cultura musical es amplia. Su solaconversación sobre el tema es cátedra.
Ahí sentado ante el piano --¿dónde más?—en su casa de laCiudad de México, “Tinacus Contrerópulos” –tal cual dice lollamaban los helénicos y suelta una carcajada--, sostiene que“primero es Dios, y luego la música”; y en seguida agrega quesu vida ha sido fantástica transcurriendo entre bemoles ysostenidos.
Uno se pregunta: ¿Cómo es posible a su edad, “montado” enla batería? El genio se le desborda.
Tino Contreras, la gran estrella del jazz, promete una largaentrevista con nuestro diario y vuelve a las teclas siempre bienacompañado por su diligente esposa, la que está al tanto de todo,Mónica Bluuuuues.