Dentro del marco por los festejos de 25 años de Televisión Azteca, la empresa estrenó su programa estrella, La Academia, en esta ocasión bajo la conducción de un experimentado Adal Ramones que le gustó al público, pues se vio seguro, amigable y hasta vacilador con algunas bromas tanto para los aspirantes como para la mesa de jueces.
La noche empezó con la noticia de que una joven de nombre Sofía, originaria de Monterrey, había abandonado la competencia, por lo que rompía con el esquema original de presentar puros duetos y las historias individuales de los aspirantes.
Adal Ramones dio la noticia en vivo y explicó que de acuerdo a las reglas, se le invitaría a otra persona que ya había hecho el casting, por lo que tomó el teléfono y se comunicaron con una de ellas.
Mientras, en el estudio se presentó la mesa de jueces integrada por Edith Márquez, Edwin Luna, vocalista de la banda La Tracalosa, Arturo López Gavito y Horacio Villalobos, bautizado esa misma noche como el juez de hierro, pues fue muy severo con sus comentarios ante todos los aspirantes.
El desfile de las aspirantes empezó con el dueto formado por Daniela Montes de Tijuana y Paola Chuc de Guatemala, quienes juntas interpretaron Tu tanta falta de querer, y aunque la voz de Paola impresionó al público, los jueces vieron otra cosa y dieron los primeros palazos de la noche, pues se limitaron a decir que “sólo fue una presentación muy mona”.
La velada que fue de casi cuatro horas, estuvo engalanada por 18 jóvenes que mostraron sus aptitudes musicales y Karen Valenzuela de Sinaloa, junto a Dalia Duarte de Tijuana hicieron su participación con el tema Que Nadie sepa mi sufrir, que fue calificada por Horacio Villalobos como “dos borrachas en una boda que se suben a cantar a las tres de la mañana”.
Para los demás aspirantes las cosas no cambiaron, pues también López Gavito aportó su granito de arena a los momentos que causaron risas en la noche, pues el escenario fue ocupado por Charly Govea de Monterrey y Monserrat Medina de Durango con el tema de reguetón 3 am de la que no obtuvieron críticas favorecedoras, pues Gavito a él lo catalogó de ser un animador de un evento político en domingo por la mañana y a ella de ser una cantante de lobby de hotel.
Isbo de Tamaulipas y Katherine de Honduras tomaron los micrófonos y juntos interpretaron el tema conocido con Camila Aléjate de mí, pero al final las opiniones de los cuatro jueves se fueron a la yugular, pues Villalobos les aseguró que si él hubiese estado en los castings ellos de ninguna manera hubieran tenido la oportunidad de pasar.
La canción Estos celos llegó al escenario de La Academia con las voces de Fernando Dávila de Coahuila y Alexis Cristóbal, originario de Chiapas, su dueto fue el más criticado de la noche, pues los jueces no pararon de decirles que su presencia fue mediocre, chistosa, desafinada y todo lo que no se busca en este reality musical que en voz de Villalobos “se trata del programa más visto de la televisión y están en horario Prime Time, que tristeza ver estas cosas”.
Ante una pausa, se presentó un número musical a cargo de Adal Ramones, quien si bien no lució su voz, sí destacó de manera muy profesional su desenvolvimiento y seguridad en el escenario y se contó con la participación de más de cien personas que forman el talento de la empresa, por lo que se vio desde un Javier Alatorre, Jorge Garralda, el elenco de Venga la Alegría, Enamorándonos y hasta a los conductores de Ventaneando.
Tras este número, fueron presentadas dos mujeres originarias de la Ciudad de México, Monserrat Ibarra y Paulina Villaseñor que interpretaron Si no supiste amar, pero su desenvolvimiento fue tan triste que los jueves volvieron a repartir palazos a las dos aspirantes.
Para beneplácito del público y fans de este reality, aparecieron en escena algunas de las voces más famosas que ha dado en doce ediciones este programa, para ofrecer un homenaje musical a Joan Sebastian, por lo que hicieron su aparición Alexis, Samuel, Erasmo, Miguel Ángel, Wendolee y Laura, lo que fue aplaudido hasta por los jueves que de verdad disfrutaron por primera vez en la noche de una buena entonación y excelentes voces coordinadas.
Volverte a amar dio pie a la presentación de Ana Sámano de Jalisco y Silvia Zepeda de Michoacán y aunque tuvieron el visto bueno de Edith Márquez, quien las calificó de artistas, Horacio Villalobos sí fue severo y les dijo que su interpretación no le había transmitido nada “Si yo no hablara español hubiera pensado que cantaron un villancico navideño. Son dos niñas muy guapas, pero no han vivido lo que ha vivido Alejandra, ella sí es intérprete”, expuso.
El sinaloense Adolfo Esponda y el michoacano Sócrates Cruz llegaron al escenario para interpretar el tema Fascinación en el que los jueces criticaron la desafinación y en la búsqueda de su autenticidad.
Las dos sorpresas de la noche fueron el chileno Diego Almonte que cantó sólo, pues su pareja Sofía de Monterrey, renunció horas antes dejándolo plantado en el escenario, pero lejos de quedar mal parado, fue el mejor calificado por los jueves, incluido Horacio Villalobos y Arturo López Gavito, quien le dieron esperanzas de convertirse en un buen cantante.
La misteriosa y nueva integrante de la noche fue Maryan Herrera de 18 años de edad, quien horas antes todavía estaba en su casa y nunca hubiese pensado que su domingo terminaría así, frente a miles de personas en sus casas y peleando la última silla de La Academia.
Su turno llegó e interpretó Hoy ya me voy, su participación fue elogiada por los cuatro jueces quienes en su último veredicto coincidieron que habían visto por primera vez en la noche, una voz que los estremeciera y les devolviera la esperanza de que tal vez, algunos de estos jóvenes se conviertan un día en estrellas de la música.
Al final, tres regresaron a su casa: Karen Valenzuela (Sinaloa), Paulina Villaseñor (Ciudad de México) y José Cruz (Michoacán), para dejar a quince alumnos que esta semana deberán de prepararse lo mejor posible para cambiar las opiniones de los cuatro jueces de La Academia.