La cara de una reconocida marca de sombreros en Australia se ha apagado. Amy “Dolly” Everett tenía 14 años y decidió suicidarse pues era víctima del acoso cibernético.

Sin dar detalles del bullying que sufrió, los padres de Dolly alzaron la voz en contra de este tipo de acoso que se comete entre jóvenes sin medir las consecuencias.

"La intimidación de cualquier tipo es inaceptable. Es un abuso y es hora de que nos levantemos cuando veamos algún tipo de comportamiento de intimidación. Dolly podría ser la hija, hermana, amiga de cualquiera. Necesitamos asegurarnos de que cualquier persona en crisis sepa que siempre hay alguien con quien hablar. Sé un amigo, revisa a tus amigos", dice un post en Instagram donde se despiden de la modelo.

El caso ha conmociado a Australia, país de origen de la joven. Los más cercanos a Dolly asistieron a su memorial vestidos de azul, su color favorito y soltaron globos al final.