Como parte del ciclo "Protagonistas de la Literatura de México", la escritora mexicana Rosa Nissán recibió un homenaje en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes por parte de la Secretaría de Cultura Federal y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
"Gracias por hacerme este homenaje que jamás imagine. Anoche no pude dormir de la emoción. Gracias por estar conmigo", mencionó Rosa Nissán en la ceremonia, en la que también estuvieron presentes el escritor cubano Carlos Olivares Baró y Elena Poniatowska, a quien la homenajeada se refirió como maestra durante el evento.
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"Desde hace años ella misma cubrió su cuerpo de letras (...) En los 60, Alicia Trueba fundó un taller de literatura en un gimnasio. Este taller lo había impartido Rosario Castellanos. Cuando el presidente Luis Echeverria la nombró embajadora en Israel, una de su alumnas me llamó para saber si quería sustituirla. No imaginé que en esos años de trabajo estaría sentada una Rosa de Jerico, una Rosa de cabello corto y risa fácil. Una Rosa preguntona y alborotadora. Acepté con temor y a las 11 de la mañana enfrenté a 20 mujeres", relató Elena Poniatowska, leyendo un fragmento de su columna dominical.
"Vi a una carita redonda y anhelante. Todas éramos mujeres de cierta edad. Ella más joven se disparaba entre las demás. Pronto pude comprobarlo porque traía textos más libres y más ganosos", continuó la escritora de "La noche de Tlatelolco: Testimonios de historia oral".
Rosa Nissán nació el 15 de junio de 1939 en la Ciudad de México. Académicamente se formó en la Universidad Femenina de México, graduándose como periodista. En su trayectoria ha escrito, entre otras obras, la trilogía autobiográfica crítica al patriarcado religioso compuesta por "Novia que te vea", "Hisho que te nazca" (1999) y "Me viene un modo de tristeza" (2019).
Asimismo ha publicado "Las tierras prometidas" (1997), donde realizó una crónica de uno de sus viajes a Israel; "No sólo para dormir es la noche" (1999) y la novela "Los viajes de mi cuerpo" (1999).
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"Rosa Nissán supo liberarse de las reglas que nos imponen desde niñas. No nació libre, al contrario, nació dentro de un alambrado de prejuicios. Las inesperadas lecciones que nos dio a lo largo de años de convivencia están reflejadas en su escritura que salta como un chorro de agua de la gran fuente de su vida", apuntó Poniatowska.
En la ceremonia, la actriz Aída Paredes realizó una lectura dramatizada de un fragmentos de la obra "Novia que te vea", la cual tuvo una adaptación al cine en 1999 dirigida por Guita Schyfter.
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