Muchos saben que Freddie Mercury fue y seguirá siendo uno de los cantantes más grandes de la historia. Sabemos de sus aportes a la música y su influencia en otros artistas que también dejaron una estela imborrable en los anales de la música; como ejemplo George Michael.
La prensa británica llevaba tiempo especulando sobre el estado de salud de Freddie Mercury, pues se le veía pálido y con una delgadez sumamente notoria. Y aunque el cantante se encontraba recluido en su mansión no faltó quien comenzó a pensar sobre el estado de salud del cantante.
El cantante se encontraba en su mansión y no permitía que la prensa lo entrevistara o siquiera lo viera, sólo sus amigos más cercanos podían verle. Estaba en una situación delicada, sedado, sin poder mantenerse en pie y sin apenas poder hablar.
Una de las personas que lo pudo ver fue Montserrat Caballé, con quien mantenía una relación muy cercana.
Mira Montse, cada uno en la vida tiene su camino y lleva su equipaje. Y dentro de este están todas las cosas que debemos cargar. Yo llevo mi equipaje igual que tú llevas el tuyo. Sería inútil tirarlo, porque… tengo que llevarlo
La mañana del 24 de noviembre Elton John y Dave Clark, dos de sus amigos más cercanos, acudieron a su mansión para verlo, pero Mercury se encontraba inconsciente y ya no respondía a ningún estímulo… pocas horas después fallecería en compañía de Jim Hutton, su novio.
Con la muerte de Freddie el mundo completo se volcó ante la noticia que conmovió a los fanáticos y a todo aquel que en algún momento había escuchado su música. Freddie Mercury quiso que en su funeral se escucharan algunas canciones, entre ellas Barcelona, que interpretó junto a Montserrat Caballé.