Ser mujer en un país rezagado en materia de Derechos Humanos es ir contracorriente, asegura la actriz y productora Vanessa Bauche. "Vamos en contra de todo lo establecido por un sistema patriarcal que reprime, minimiza, discrimina y humilla. Y más aún si eres morena, de origen indígena, con alguna discapacidad, o incluso sobrepeso; en todos los ámbitos y en el artístico mucho más, porque es muy cruel, demandante y sexista completamente", agrega.
Hace más de 20 años que Vanessa Bauche es actriz y agente de cambio. "He luchado en contra de los feminicidios, al principio en Chihuahua y ahora en todo el país", relata quien el año pasado creó tres instancias para desarrollar sus propios proyectos, tanto artísticos como sociales: la plataforma Primero Somos Mx, la cuenta de Twitter @primerosomos y la página www.primerosomos.mx.
La actriz y productora utiliza estos medios para producir y difundir contenidos en un gran proyecto de participación artística, deportiva, de participación ciudadana y empresarial. Además, este año abrió el Centro Nacional de Cultura de Paz.
"Todas estas instancias van a generar proyectos artísticos de impacto social hacia una cultura de paz, colaborando con otras instancias y productores. Ya tenemos en preproducción un largometraje con perspectiva de género de Adolfo Dávila, basado en diez historias reales de feminicidio, desde un enfoque amoroso y dignificante", adelanta.
En ese mismo sentido, a finales de este mes, comenzará a grabar una serie para Netflix, "que también va a llamar mucho la atención, porque viene de un proyecto mundialmente reconocido muy exitoso para jóvenes".
La actriz, que reconoce que ha rechazado proyectos en los que la imagen de la mujer es denigrada, habla de los sacrificios que ha tenido que hacer en pro de un cambio en la sociedad. "Ir a favor de nuestros derechos y de la equidad de género a veces significa rechazar oportunidades, sacrificar posibilidades económicas, sobre todo cuando eres cabeza de familia", afirma.
Vanessa, quien es promotora del Paro Nacional de Mujeres que se lleva a cabo hoy, agrega: "Es lo mismo que decimos del paro, es un día de abstenerse, por una vida con nosotras, son sacrificios que tienen que hacerse entendiendo que no solamente van a favor de una misma, sino que es para poder avanzar en materia de equidad y de un enfoque positivo en lo que hacemos, sobre todo siendo figuras públicas, porque tenemos la posibilidad de transmitir este mensaje de una manera pacífica y causar un impacto positivo a nivel masivo, si entendemos de qué va la lucha de género a nivel mundial".
Como sociedad, señala, no podemos seguir tolerando, ni normalizando la violencia. Apunta que en la misma colonia y en la misma semana que secuestraron y mataron a la pequeña Fátima, otra niña un poco mayor, también llamada Fátima, "fue atravesada por una sierra eléctrica y nadie habló de ella".
Su activismo va rindiendo frutos. Gracias a su comunicado Amparos feminicidas, -en el que propone la creación de la Ley Abril (en memoria de Abril Pérez), que castigue a funcionarios públicos que desestimen las denuncias de la violencia de género y la violencia infantil; que se dé un acompañamiento integral a los huérfanos y medidas de seguridad a los sobrevivientes y a las denunciantes de la violencia de género- en enero pasado las diputadas Gabriela y Karen Quiroga, presentaron la propuesta en el Congreso, "y algunos de estos puntos ya fueron considerados para las reformas que se van a hacer al Código Penal Federal. Estamos siendo escuchadas, gracias a la unión de todas las mujeres del mundo, hay que honrar la memoria de todas las que han luchado a lo largo de la historia por la equidad de género y preocuparnos por las que vienen, hay que lograr que la realidad mundial sea más gentil, más comprensiva y sobre todo que haya igual en materia de Derechos".