Durante la última década, los cineastas mexicano han acaparado los principales escaparates del mundo. Directores como Guillermo del Toro, Alejandro González Iñárritu o Alfonso Cuarón han obtenido premios como el Oscar por diferentes proyectos de alcance mundial, aunque sólo Cuarón con Roma presentó una película netamente mexicana.
Sin importar esto, su reconocimiento mundial ha sido un impulso fundamental para el desarrollo de otros cineastas nacionales, como considera Arturo Aguilar, especialista en cine mexicano. “Desde una evaluación cinematográfica, mas no de industria, el cine mexicano sigue viviendo un buen momento gracias a este fenómeno”, explica.
Cinta Mentada de padre, una oda a la radio y un guiño al cine de oro mexicano
En términos de industria, el cine mexicano aún es “muy pobre”, pues el consumo del público es sólo del 8%, según datos obtenidos en el Anuario Estadístico 2018 del Instituto Nacional de Cinematografía. Ello se suma a la “oferta limitada” que llega a salas, pues de las diez películas mexicanas más taquilleras de lo que va del 2019, “el 70’% está compuesto de comedias románticas, animaciones y por ahí un que otra de género como puede ser de terror”, señala el también crítico cinematográfico.
Dentro de este fenómeno en constante evolución, hoy se celebra el Día Nacional del Cine Mexicano, un festejo que busca “reconocer la importancia e incidencia del cine nacional en los diversos procesos de transformación y consolidación democrática”, como lo indicaron representantes de la Cámara de Diputados y Senadores cuando fue aprobada esta iniciativa en 2017.
En este marco, Arturo Aguilar destaca a algunos directores y directoras a quienes considera hay que seguirles la pista, pues son clave para entender y adentrarse en el cine mexicano que ha colocado a nuestro país como uno de los más destacados en materia cinematográfica a nivel mundial.
José Manuel Cravioto
Documentalista, director de cintas como Mexican gangster y realizador de la serie Diablero de Netflix, Aguilar define a Cravioto como “un director que entiende el oficio, el cómo debes ser capaz de hacer diferentes historias, en diferentes estilos y no casarte sólo con uno. Sabe irse desde el género fantástico con lo que hizo con Diablero hasta cuestiones documentales en su cine –como Seguir siendo, que sigue a Café Tacvba–”, destaca.
Lila Avilés
La debutante y ganadora de festivales como el de Morelia, Palm Springs o La Habana, es una directora que con su película La camarista –actualmente en cartelera– “levanta la mano súper fuerte con un enorme talento. Esta película es de una sencillez impresionante, muy bien hecha, ejecutada formalmente. Además con un montón de niveles de lectura que ella quiso ponerle, dando como resultado un producto súper completo”, dice.
Gabriel Mariño
Director de películas como Un mundo secreto y Ayer maravilla fui, este cineasta es alguien que “en cada nueva película está haciendo algo interesante, incluso a nivel industria en los formatos de producción que utiliza para hacer una mezcla de cine independiente y a veces de road movie que resulta muy interesante para el espectador”, explica el especialista. Mariño de hecho trabajó con José Manuel Cravioto en la realización de Olimpia, animación sobre el movimiento de 1968.
Tatiana Huezo
Ganadora de tres premios Ariel por su cortometraje documental Ausencias y sus largometrajes El lugar más pequeño y Tempestad, Arturo Aguilar considera que Huezo es “una de las documentalistas más importantes que levanta la mano a favor del cine mexicano. Una propuesta punto y aparte con un nivel narrativo, emocional y casi conceptual; un cine poético y con reflexión social que personalmente me parece increíble”.
Sebastian Hofmann
Con Halley y Tiempo compartido, sus dos únicos largometrajes, el especialista destaca a este cineasta como uno de aquellos que “está haciendo cosas muy interesantes y diversas. Tiempo compartido muestra una evolución donde va encontrando cómo manejar y construir atmósferas y manejar a sus personajes. Pero Hofmann es alguien interesante que también está haciendo industria, pues involucra la parte de la propia distribución con Piano –también productora–”.
Alejandra Márquez
También galardonada a nivel internacional en el festival de Palm Springs por Las niñas bien y destacada por la revista Variety como una de las 10 directoras a las cuales seguir, Márquez es una realizadora que “no nada más es una propuesta de dirigir bien, sino que sabe bien sus historias dentro de cierto tono. Ella misma está sacuendiendo la industria con la idea de adaptar obras como la de Guadalupe Loaeza que conectan a diferentes generaciones”, afirma.
