Eliades Ochoa embruja el Metropólitan con su son cubano

Uno de los fundadores de Buena Vista Social Club se presentó tras 10 años de ausencia en el país al que espera volver pronto, en correspondencia al cariño del público

Kevin Aragón / El Sol de México

  · sábado 21 de septiembre de 2024

Hombre de campo, como orgullosamente ha dicho Eliades Ochoa, con cada canción se detenía para intercambiar algunas palabras con el público. Foto: Cortesía Ocesa / José Jorge Carreón

Si resistirse a bailar un buen son es difícil, el que sea cubano, en vivo y a cargo de Eliades Ochoa es prácticamente imposible. La música de esta leyenda caribeña siempre es capaz de transformar cualquier lugar en una pista de baile, una fiesta en el malecón de La Habana, o, mejor aún, en una noche guajira rodeada de estrellas.

De ese embrujo cubano fue víctima una vez más el pueblo mexicano que se dejó seducir durante la primera presentación en el Teatro Metropólitan de Eliades Ocha, recordado como uno de los miembros fundadores del Buena Vista Social Club, quien agradeció el entusiasmo con que fue recibido.

“Bueno, familia, será una buenísima noche. Hacía 10 años, por lo menos que no venía a México. Vine hace muchos años, grabamos un disco y veníamos muy seguido, pero después comenzaron a haber problemas con los productores de aquella época, porque los de ahora son buena gente”, dijo Eliades, apenas salió al escenario con su guitarra de ocho cuerdas y su distintivo sombrero, para luego rematar: “Pero bueno ahora venimos a preparar las condiciones para seguir viniendo”, una oración que hizo estallar en aplausos el público.

Congas y bongós, claves, trompeta y saxofón, apenas dos canciones de su nuevo álbum: “Vamos a alegrar el mundo” y “Guajiro” y el público ya se ponía de pie tratando de encontrar un hueco entre las butacas y el escenario para bailar, hasta que no quedó de otra más que invadir los pasillos del recinto.

Foto: Cortesía Ocesa / José Jorge Carreón

Hombre de campo, como orgullosamente ha dicho Eliades Ochoa, con cada canción se detenía para intercambiar algunas palabras con el público, contando cómo las había compuesto. Una de ellas, fue “Creo en la naturaleza”, que escribió viendo el amanecer y cómo las estrellas se escondían, como si la natura le dictara.

Y si bien las canciones de Eliades son pegajosas y convocan al pronto desenfreno de pies, hombros y caderas, lo cierto es que cuando suena el repertorio que tocó con Buena Vista Social Club, el público estalla en clamores. Esa noche no fue la excepción. El público hizo retumbar el Metropolitan, al son de “El cuarto de Tula”, y “Chan Chan”.

Foto: Cortesía Ocesa / José Jorge Carreón

“Ustedes están dando la razón para que yo haga todo volver pronto, con ustedes no hay que preguntar cómo va la noche, los veo y ya lo sé”, dijo agradecido el músico, quien cantó con gran fervor “Candela”, “Anita Tun Tun” y “Se soltó un león”. En fin, una noche simplemente para recordar y esperar que vuelva a suceder pronto.