Harry Styles, el ex integrante de One Direction, se consolidó como el británico más rico del 2024 con menos de 30 años de edad.
El intérprete de “As it was”, de 30 años de edad, fue reconocido por la publicación Heat Magazine, como el número uno de la Heat Rich List con una fortuna de 200 millones de libras esterlinas.
En esta exclusiva lista de los artistas del Reino Unido más acaudalados, menores de 30 años, le siguen Dua Lipa (29) con 104 millones de libras y Tom Holland (28) con 30.6 millones de libras esterlinas.
Harry Styles saltó a la fama con la boyband One Direction que se formó en 2010 gracias al concurso de canto del programa de televisión The X Factor.
Liam Payne, Zayn Malik, Niall Horan y Louis Tomlinson junto a Styles lograron convertirse en unas estrellas admiradas por millones de fans en todo el mundo, cuando ellos aún eran adolescentes.
Años más tarde cuando la banda se separó, Harry empezó su carrera en solitario y lanzó tres álbumes “Harry Styles”, “Fine Line ” y “Harry´s House”.
Este último, se lanzó en 2022 y fue un éxito para el cantante, el cual lo llevó a conseguir otros logros como un Guinness World Records por “As it Was”, como la canción de un cantante masculino más reproducida en 24 horas en Spotify.
Este mismo sencillo hizo que Harry se posicionará en el número uno de la lista Billboard de Estados Unidos durante quince semanas, el mayor tiempo que un solista ha permanecido en el top.
Harry Styles trabajó en una panadería antes de ser millonario
Si bien, Harry Styles es conocido prácticamente en todo el planeta, el compositor y actor tenía una vida normal en Inglaterra cuando era un adolescente.
El cantante de “Watermelon sugar” quien nació en Holmes Chapel, Inglaterra, el 01 de febrero de 1994, trabajó en una panadería en su ciudad natal.
Harry tenía 14 años cuando trabajó para el W Mandeville, según The Mirror, la estrella era muy apreciada por el dueño del lugar y sus compañeros.
Styles ganaba alrededor de 8 dólares por hora y desde ese entonces atraía la atención de muchas admiradoras.
“Era muy respetuoso con el personal. Le agradaba mucho a los clientes. Cuando Harry trabajó aquí, la tienda aumentó su clientela femenina. A veces había hasta 12 mujeres que entraban al mismo tiempo”, dijo Simon Wakefield, quien era su jefe, al diario británico.