Lleva 17 años dando vida al Dr. Richard Webber. James Pickens Jr. esboza una sonrisa al recordar todas las satisfacciones que le ha dado interpretar este personaje en la serie Grey’s Anatomy. Y es que además de haber cambiado el rumbo de su carrera, lo ha llevado a acompañar a los fans durante los momentos difíciles de sus propias vidas.
Hoy llega la entrega número 17 de este drama que aborda la vida de los médicos y sus pacientes en un hospital, o varios, de la ciudad de Seatlee.
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"Somos un vehículo de lo que estamos viendo culturalmente en nuestra sociedad, queremos mantenerlo entretenido, pero al mismo tiempo esperamos que pueda transformar algunas vidas", comentó en una charla con El Sol de México.
A lo largo de sus diecisiete temporadas, la serie creada por Shonda Rhimes en 2005 y protagonizada por Ellen Pompeo, ha puesto a los médicos y enfermeras del hospital Grey Sloan Memorial a librar una serie de crisis basadas en problemáticas reales, algunas de las cuales incluso reflejan situaciones de violencia por las que ha atravesado la sociedad estadounidense en los últimos años, como tiroteos, secuestros, accidentes, el movimiento Me too y ahora, la pandemia causada por el coronavirus.
El actor reconoce el trabajo de todos los guionistas que han pasado por la serie. Su labor, subraya, no es solamente escribir un guion que enganche al público, sino también estar actualizados sobre lo que sucede tanto en el mundo como en su país, para "mantener el programa fresco y vibrante".
Para James, quien hace el papel de un médico que se convierte en mentor de decenas de residentes, pero al mismo tiempo libra una lucha contra su adicción al alcohol, este proyecto ha sido una forma de llevar esperanza a los televidentes, estableciendo un balance entre la ficción y la realidad para demostrar que,, siempre hay una luz al final del túnel.
"No es tan malo ver que estos personajes están pasando por lo mismo que ellos, pero en una manera en la que es más digerible, a falta de un mejor término", señaló.
"Podemos vivir estas situaciones por ellos, al final de algo que podría ser una tragedia, encuentran un poco de heroísmo. Esa es la meta de la televisión, trasladar a la vida real algo con lo que nos podamos reír ".
En el caso de la actual crisis sanitaria por la que atraviesa el mundo, reconoce que es algo sin precedentes y ha sido difícil abordarlo debido a la cercanía a nivel personal que muchas personas han tenido con el virus, por lo que en todo momento procuraron ser muy respetuosos con las historias, y mostrar algo que resultará en una digna representación de la labor médica.
CONSENTIDOS DEL PÚBLICO
Una característica de la serie es que a lo largo de sus 356 episodios han despedido a personajes que formaban parte de los favoritos del público como pasño con Derek Shepard (Patrick Dempsey) y ahora con Alex Karev (Justin Chambers).
Entre risas, James bromea sobre el hecho de que entre el elenco siempre existe el temor a quedarse sin trabajo de la noche a la mañana, pero se siente conmovido con el cariño que sus fans le demostraron durante la última temporada cuando parecía que Richard Webber moriría víctima de una extraña enfermedad.
"Obviamente hay muchos factores que juegan ahí, pero creo que todavía hay muchas historias por contar. Quizás se pueden trasladar a otras temporadas, no estoy seguro, pero creo que todavía hay muchas experiencias que le pueden pasar a nuestros personajes", señaló.
Y aunque no está seguro cuánto tiempo más se mantenga al aire el show, se siente muy afortunado de formar parte de él. "El Doctor Webber cambió mi carrera, diría que incluso cambió mi vida. Siempre voy a estar asociado a ese personaje, fue un punto de lanzamiento para mí y siempre voy a estar agradecido por eso", finalizó.