Diana Frances Spencer, mejor conocida como Lady Di, Diana de Gales o la princesa Diana, probablemente sea una de las figuras más icónicas que el siglo XX le dejó a la historia. Igual de trascendentes fueron sus actos, que en muchas ocasiones se alejaron del protocolo real por acercarse a la gente. Sin embargo, una de las postales más emblemáticas de Diana vino de su "vestido de la venganza" y su moribunda relación con el príncipe Charles, donde el divorcio fue la única opción.
El 29 de junio de 1994 quizá sea un día que la familia real no recuerde con buena cara. Había pasado cerca de año y medio desde que se anunció la separación de Diana y Charles, y ese día la cadena ITV emitió un documental sobre el heredero al trono de Reino Unido, donde confesó su infidelidad hacia la princesa.
El documental pretendía mejorar la imagen del príncipe –luego de los escándalos por su aventura con Camilla Parker–; sin embargo, sus declaraciones marcaron el inicio de la debacle en ese día. Más tarde, Lady Di tenía programado participar en la gala benéfica anual de Vanity Fair en la Serpentine Gallery.
Nace el "vestido de la venganza"
Mucho se ha especulado sobre la relación entre el vestido que la princesa Diana utilizó esa noche y las declaraciones de su todavía esposo. Sin embargo, un documental sobre Diana reveló que su atuendo fue una elección de último minuto.
Se suponía que la princesa atendería el evento con un Valentino, pero un comunicado de prensa reveló la información y se dio el cambio de planes.
La diseñadora del vestido negro, Christina Stambolian, declaró años más tarde que su creación había sido diseñada para la princesa tres años antes de que lo usara por primera vez.
Este hecho es uno de los que más alimentaron las suspicacias alrededor del Stambolian que sería conocido como "el vestido de la venganza". Todo el atuendo, desde el escote, los hombros descubiertos, las medias negras transparentes, hasta los stilletos, rompía con la etiqueta de la familia real.
Anna Harvey, la estilista de Diana, aseguró que aquella noche la princesa quería lucir "como un millón de dólares".
La sincronización entre el atuendo y las declaraciones del heredero al trono pasaron a la historia como uno de los eventos más recordados en la sucesión de capítulos que culminaron con la trágica muerte la antigua royal.
Aunque el vestido de la venganza no obtuvo el mote hasta que una casa de subastas se refirió a él de esa manera en 2013, es su momento fue recibido como una declaración, que, de acuerdo con la prensa inglesa, robó los titulares a la infidelidad de Charles, por lo que se instauró en la memoria colectiva como el primer grito de libertad de la princesa Diana con respecto a la corona británica.