Mariska Hargitay, reconocida por el personaje de Olivia Benson en "La Ley y el Orden", sufrió la pérdida de su madre, Jayne Mansfield, a causa de un accidente automovilístico que pasó a la historia.
En 1966, Mansfield viajaba en un auto compacto junto a sus tres hijos, su abogado y el conductor de un vehículo rentado para viajar de Mississippi a Nueva Orleans, sin saber que ese sería su último destino.
En ese entonces, Mariska tenía sólo tres años, ella junto con sus hermanos, fueron los únicos sobrevivientes del fatal accidente.
Jayne Mansfield iba a bordo de un Buick Electra 225, un auto relativamente bajo, pero espacioso al grado que podían viajar tres personas cómodamente en el asiento del frente.
Sin embargo, las dimensiones del auto provocaron que este quedara atorado en la parte de abajo de un tráiler, después de que su chofer no logró percatarse de que el transporte pesado estaba al frente de ellos, debido a una fumigación con insecticida recién rociada en la autopista US 90, que complicó las condiciones de visibilidad.
Tras el impacto a toda velocidad, la actriz estadounidense y sus acompañantes sufrieron graves lesiones a la altura de la cabeza y su muerte fue instantánea, mientras que los niños resultaron ilesos, según el portal Univisión.
Barras Mansfield, el dispositivo de seguridad creado en honor a la madre de Mariska Hargitay
A raíz de este aparatoso accidente, las autoridades estadounidenses decidieron establecer como regla vial, que los transportes de carga pesada tuvieran colocadas barras de metal largas con reflejante de color rojo y blanco, para evitar accidentes como el de Jayne Mansfield.
El mecanismo de seguridad recibió el nombre de ICC Bar, pero con el tiempo fue conocido popularmente como “barra de seguridad Mansfield”, en honor a la estrella de Hollywood, según 20minutos.
¿Quién era Jayne Mansfield?
Jayne Mansfield, era considerada la rival de Marilyn Moroe, era una mujer inteligente, de una familia acaudalada de origen británico y alemán, así como posedora de una belleza exuberante.
Estudió Arte Dramático en Los Ángeles y los 17 años se tiño de rubia para entrar al mundo de Hollywood por la puerta grande.
Su participación en la portada de la revista Playboy catapultó su fama, lo siguiente fue un contrato con Warner Brothers y más tarde con Twentieth Century-Fox, que la convertirían en una estrella del cine, así lo reportó Harper's Bazaars.
Una fotografía de Jayne Mansfield junto a Sophia Loren se convirtió en una imagen icónica que capturó el momento en que Loren mira fijamente el pecho de la actriz, uno de sus atributos que más llamaba la atención.
Para Mariska Hargitay, que su mamá fuese admirada y reconocida por su belleza en la industria del entretenimiento no era algo que del todo condenable, sin embargo, habría preferido que destacaran su inteligencia y talento y no sólo las medidas de su cuerpo.