Luego de 10 años de ausencia, Natalia Esperón regresó a la pantalla chica de la mano del productor Salvador Mejía, con la telenovela Corazón guerrero, una adaptación de la producción argentina Valientes, que combina la venganza con el amor.
Para la intérprete, quien ha brillado en títulos como Agujetas de color de rosa y El niño que vino del mar, resulta muy grato regresar en una época donde hay tanto contenido al alcance del público, pues siente un compromiso con defender el género que la lanzó a la fama.
“Es seguir haciéndolo y no dejar que se pierda, checar las historias y que se sigan produciendo. Porque cuando ves las series y películas, ahí está el melodrama también”, comentó en entrevista.
Su parte favorita es que a través de todas esas producciones que brillaron en Televisa, el mundo conoció el trabajo que se realiza en México, y confía en que la fidelidad del público que quedó cautivo, les permitirá continuar con nuevas historias.
“Siempre habrá alguien esperando prender la televisión para ver su novela. Hay un público bien fiel, se puede seguir construyendo este vínculo con las nuevas generaciones”, agregó.
La telenovela sigue la historia de Jesús (Gonzalo García Vivanco), Damián (Rodrigo Guirao) y Samuel (Christian de la Campa), tres hermanos que se separan tras el fallecimiento de su padre, y quedan en hogares diferentes. Al crecer logran reencontrarse, y buscarán vengarse del responsable de haber destruido a su familia.
Natalia da vida a Guadalupe García, la matriarca de una familia conformada por puras mujeres que lucha día con día por salir adelante. La actriz considera que su personaje refleja su propio deseo por seguir trabajando y crecer a nivel laboral.
“Siento que Guadalupe es un viaje interno bien lindo. Cuando vi a una mujer tan trabajadora en el guion, acepté, me encantó interpretarla”, comentó. “No es uno quién busca al personaje, es al revés. Siempre viene a dejarte algo, que veas una parte de ti que no te estás dando cuenta”.
Corazón guerrero se transmite de lunes a viernes a las 16:30 horas por Las Estrellas.