Niall Horan finalmente pudo presentarse en México. El miembro de One Direction ofreció dos conciertos en el Pepsi Center como parte de su proyecto solista donde promociona su disco Flicker.
La emoción de sus seguidoras fue tal que en la zona más cercana al escenario se generó una ola de empujones, por lo que el cantante tuvo que detener el show durante The tide, apenas la segunda canción mientras los gritos efusivos inundaban el recinto que agotó las siete mil 600 localidades disponibles.
“Lo que les voy a decir no es para gritar. ¿Ven lo qué pasa? Vamos a tener que cancela el show si siguen así. Cuídense entre ustedes, nada de aventarse porque si una persona pequeña se cae (podrían aplastarla)”, pidió el cantante que lucía sorprendido. “Vamos a cantar la canción otra vez y vamos a pasarla bien”, agregó.
El miembro de One Direction continuó la velada normalmente, aunque algunas fans fueron saliendo poco a poco, algunas en silla de ruedas, de la zona delantera por la presión de la gente que empujaba a quienes estaban más cerca del escenario.
Durante la hora y media que duró el show, Niall Horan cantó todos los temas de su primer material como solista, entre los que destacaron On my own, Toomuch to ask y Fire away. Así como los covers Dancing in the dark, de Bruce Springsteen y Crying in the club, de Camila Cabello. También interpretó Fool’s Gold y Drag me Down, de su etapa con One Direction.
Las fans no pararon de gritar y corear las canciones en ningún momento, excepto durante Flicker, en la que el cantante pidió guardar los celulares para “grabar ese momento en su memoria” y que fue respondido con un silencio general para escuchar la canción en todo su esplendor.
El cantante recordó que este concierto estaba programado originalmente para el 26 de septiembre de 2017, pero que tuvo que ser pospuesto por el terremoto que sacudió a la Ciudad de México una semana atrás. “Estoy feliz de hacer este show porque sé que el año pasado tuvimos que cancelarlo por un momento trágico. Así es que quisiera dedicar este show a quienes hayan perdido a alguien”, dijo.
Durante hora y media, el cantante sedujo a sus fans tocando la guitarra o el teclado, sonriendo o hablando con sus seguidoras hasta el final cuando se despidió con Slow Hands y Mirrors, acompañado de una bandera mexicana que ondeó después de que sus fans le cantaran el Cielito lindo.”Muchas gracias. Adiós”, se despidió el cantante en español.