Ofelia Medina ha vivido en 53 años de carrera distintas etapas del cine mexicano. Desde aquella que confrontó y retrató los cambios sociales hasta el que hoy busca salir adelante después de la pandemia.
Esta noche, la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas reconocerá su trayectoria y sus aportaciones al cine nacional con el Ariel de Oro, un premio que le significa un contraste de emociones, pues llega unas semanas después de despedir a su mamá.
"Cuando recibí la noticia me encontraba en Mérida. Estaba visitando a mi madre que para entonces estaba muy cerca de la muerte. Así que saber del Ariel y que mi madre pronto viajaría al infinito me hizo una revolución interior. Lo bonito es que ella alcanzó a saberlo y se puso muy contenta. Así que recibir el premio es un gran apapacho de la comunidad y de mi madre que alcanzó a saberlo".
El Ariel de Oro llevará una dedicatoria especial a su madre, pues fue ella quien le inculcó el amor por las artes y la vida. "Y he trabajado mucho por esto", afirma. "Es producto del esfuerzo y trabajo de muchas personas. Así que le dio gusto, esperaba que eso me hiciera más fuerte y me impulsara a trabajar más".
EL MACHISMO ESTÁ LATENTE
La carrera cinematográfica de Ofelia Medina comenzó en 1968 con Pax, una película dirigida por el cineasta alemán Wolf Rilla que realizó en un tiempo clave para la historia nacional.
"Fue un momento de una verdadera transformación social", recuerda la actriz sobre la época. "Los movimientos que se dieron afectaron al mundo entero, no sólo a nuestro país. Jóvenes y mujeres tomamos nuestro lugar en la historia a partir de entonces".
En aquella época, dice, había pocas mujeres involucradas en la dirección, el guión o cualquier otra área de producción mayormente acaparadas por los hombres. "En mis inicios sólo trabajé como actriz, porque esas hemos habido siempre, ¡ya sólo faltaba que no!".
Al machismo se lo topó de frente cuando decidió realizar su primer trabajo como directora, el cortometraje documental Se construyen sueños. "Encontré oposición, incredulidad y agresión por parte de hombres: '¡Ay, ¿Cómo? ¿Tú dirigir? No, no, lo haces muy mal, ¿Cómo se te ocurre?'", fueron algunos de los comentarios que escuchó.
La actriz celebra que esos tiempos hayan cambiado, porque reconoce que en la industria la presencia de talento femenino ha incrementado de manera considerable.
"Y eso ha venido a enriquecer y completar la visión del cine mexicano porque antes era sólo una masculina. Es maravilloso ver ahora a directoras y productoras que además siguen, como Bertha Navarro, precursora de la participación de las mujeres. Eso es maravilloso de celebrar en estos tiempos".
PRESENTA DOCUMENTAL
Los comentarios en contra que recibió cuando quiso dirigir hoy son obsoletos. El 3 de octubre estrenará en la edición 36 del Festival Internacional de Cine en Guadalajara La llevada y la traída.
Se trata de un documental donde plasma el ciclo ritual de la Señora de la Expectación de Zapopan, también conocida como o Virgen de Zapopan, proyecto que llevó más de dos años realizar.
"Es una película monumental porque retrata un hecho monumental. Es una producción más grande que la del 007, porque nadie ha tenido a 30 mil danzantes y dos millones de personas haciendo una peregrinación de una imagen que mide 34 centímetros", señala.
El proyecto que llevó ocho meses de investigación y más de un año de edición lo realizó en colaboración con la productora Begoña Lecumberri y la editora Claudia de Berardinis. "Filmamos del 20 de mayo al 12 de octubre las visitas más importantes que hace la virgen. La visita a Chapala, Tonalá, Tlaquepaque, al Mercado de San Juan y barrios tradicionales de Guadalajara".
MÁS ALLÁ DE FRIDA
Ofelia Medina será reconocida por la AMACC gracias a su trabajo actoral en películas claves de la cinematografía nacional como Frida, naturaleza viva, por la que recibió el Ariel de Mejor Actriz en 1983; Voces inocentes y Las buenas hierbas, que le entregaron otros dos premios en la terna de Mejor Coactuación Femenina y El cambio, por la que nuevamente fue nominada a este mismo premio.
Su trayectoria se compone también de trabajos como guionista, productora y sobre todo activista, porque, como ella dice, "hago cine cuando tengo oportunidad".
A través del Fideicomiso para la salud de los niños indígenas de México (que en Facebook se encuentra como FISANIM A.C.), la primera actriz se ha vinculado con organizaciones indígenas y de derechos humanos para propiciar el derecho a la alimentación y salud de los niños indígena de México.
"Mi vida en realidad la paso entre un set y la montaña en las comunidades de Oaxaca, Chiapas y Guerrero. Tengo una fundación (FISANIM A.C.) en la que trabajamos para la niñez indígena. Hoy en día, sólo en Chiapas, hay más de 10 mil desplazados".
Ofelia Medina obtendrá el Ariel de Oro al igual que el sonidista mexicano Fernando Cámara. Los premios de la 63 edición del Ariel que organiza la Academia
Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas serán entregados esta noche en un programa especial que transmitirá Canal 22 a las 21 horas.