Un mundo dominado por mujeres, repleto de color rosa y sororidad, donde todos los días son perfectos y todas las noches hay fiestas con coreografías y vestuarios espectaculares.
"Hola Barbie", "Hola Barbie", "Hola Barbie", se saludan unas a otras las muñecas habitantes de Barbieland, antes de iniciar sus días en una playa rosada, donde estarán acompañadas de sus Ken (cuya vida únicamente tiene sentido si Barbie lo mira).
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Esa es la realidad que una Barbie estereotípica (interpretada por Margot Robbie) vivirá día con día, hasta el final de los tiempos. O al menos eso creía, pues de la nada su utopía se ve alterada por pensamientos sobre la muerte, una ducha fría, un waffle quemado, una violenta caída del techo de su casa, y un repentino cambio en la anatomía de sus pies.
A partir de ese momento, la directora Greta Gerwig (Ladybird, Mujercitas), quien coescribió el guion junto con su esposo, Noah Baumbach, narra el viaje de la muñeca que, avergonzada y desconcertada, recurre a sus amigas para averiguar qué provocó esa ruptura de su rutina.
El primer paso de esta travesía es visitar a Barbie Rarita (Kate McKinnon), un juguete caído en desgracia por haber recibido un trato rudo en el mundo real, quien la invita a cruzar hacia la realidad.
Su misión comienza con un pequeño imprevisto que marcará el destino de esta travesía, pues su fiel Ken (Ryan Gosling) se une a ella inesperadamente. A bordo de un auto, un bote, una nave espacial, un camper, una bicicleta, y un par de patines, ambos muñecos se dirigen a California.
La búsqueda de su niña (la que deberá cuidarla) comienza con algunos tropiezos para Barbie, debido a que poco a poco se da cuenta de las dificultades que enfrentan las mujeres, y que, lejos de ser perfectas y tener un lugar en el mundo, como se cree en Barbieland, batallan para salir adelante en un entorno dominado por los hombres.
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Con alusiones a la lucha de poder entre hombres y mujeres, referencias a películas como 2001 Odisea del espacio y El padrino, esta comedia rompe estereotipos ligados a Barbie, y visibiliza de los retos que enfrenta el género femenino.
La película, que ya está en cartelera, plantea una reflexión sobre feminismo y equidad, algo más profundo que la simple historia de un juguete.
