Adentrarse en el mundo del narco más que preocupar o emocionar a sus actores significó un descubrimiento sobre los orígenes y actual realidad que vive México y América Latina alrededor de este tema. Este es el caso de Diego Luna y Michael Peña, quienes protagonizan Narcos: México, cuarta temporada de esta serie producida por Netflix que este viernes estrena.
Luego de retratar la historia de Pablo Escobar o Gilberto Rodríguez Orejuela, Narcos se traslada a nuestro país, en específico a Guadalajara y al surgimiento del mundo de narcóticos que ahora impera en nuestro país. La serie explora el trabajo de narcotraficantes como Rafael Caro Quintero, Ernesto Don Neto Fonseca, e incluso los primeros pasos de personajes como Joaquín El Chapo Guzmán.
Diego Luna, que da vida a Miguel Ángel Félix Gallardo no es ajeno a esta realidad. Como millones de mexicanos, vivió durante su adolescencia, y de manera indirecta, el surgimiento del imperio de narcóticos en nuestro país. Sin embargo, adentrarse en esta historia le ofreció otra visión sobre la realidad de este tema y su correlación la corrupción.
El actor se enfrentó a las críticas por parte de algunos usuarios en Twitter cuando se informó que interpretaría a Miguel Ángel Félix Gallardo, pero lo que realmente lamentó el actor fueron algunos comentarios que más bien criticaban a las producciones que hablaban sobre el narcotráfico y la cantidad de asesinatos alrededor del tema.
“Había opiniones en Twitter que decían ‘Dejen de contar esas historias y cuenten historias bonitas’. Es la única con la que abiertamente sí estoy y estaré en contra siempre, porque lo único que no podemos dejar de hacer es contar estas historias. Los 250 mil muertos, perdóname, pero son números que no deberíamos aceptar”, aseguró.
“No hay ninguna dictadura en América Latina que se pueda comparar; la gran pérdida de vidas en Estados Unidos en la Guerra de Vietnam no está ni siquiera cerca de esos números. Por eso, si de un tema debemos de hablar es este, del que más nos debería preocupar””, dijo.
El caso es similar para Michael Peña. Aunque el actor estadounidense tenía un bagaje previo, adentrarse a la historia de Narcos: México le permitió descubrir que el verdadero protagonista alrededor del tema del narco era la corrupción. “Para mí fue lo más sorprendente y entender qué tan lejos llegó la corrupción. Pero no sólo eso, sino el pensar ¿cómo la gente puede pelear contra eso cuando el gobierno y la policía eran tan corruptos?”, dice.
Peña asegura que el éxito global de una serie como Narcos: México tiene que ver con la pertinencia y la vigencia del tema, como sucedió “en los años setenta, las pandillas eran muy grandes en NY. Ahora mucha gente se pregunta ¿por qué hay tanto sobre los narcos? Pues porque eso es lo que está en las noticias como entonces”, comenta el actor que interpreta al agente de la DEA, Kiki Camarena.
Pero el tipo de repercusiones que una producción como estas pueda tener es limitado. Difícilmente puede aportar algo a la discusión sobre la legalización de la mariguana en nuestro país, asegura Diego Luna. El trabajo de este tipo de producciones repercute más en el espectador, asegura.
“Yo le decía al showrunner, Eric Newman: si voy un día a Alemania o a Inglaterra y me encuentro a alguien que antes de meterse una línea de cocaína piense un poquito de dónde viene, pues ya chingamos con la serie. Porque hasta ahí llegan los tentáculos de este pulpo”, dice.
LA TEMPORADA MÁS GRATIFICANTE
Eric Newman ha estado involucrado en el proyecto de Narcos desde su primera temporada en 2015.Ahora como showrunner de Narcos México, el productor de este programa destaca que uno de sus máximos logros es el talento que lograron reunir, lo que dio como resultado una serie superior a las expectativas que se tenían en inicio.
“Nos dejamos abrazar por el gran elenco que teníamos. Joaquín Cosío es uno de los mejores actores con los que he trabajado en mi vida. Tenoch Huerta, Tessa Ia, Teresa Ruiz, Chema Yazpik, Diego Luna… es espectacular. Cuando estaban juntos en el set era como Ocean’s Eleven (La gran estafa)”, apuntó el productor. “Personalmente, esta temporada es por mucho la más gratificante en mi vida”.
Sin embargo, Narcos: México comenzó su producción en nuestro país con una mala noticia, que fue la muerte de Carlos Muñoz Portales, gerente de locaciones, que fue asesinado en el Estado de México mientras buscaba espacios para la filmación de esta temporada.
“Emocionalmente fue terrible. Era alguien muy querido por todo el mundo, alguien que simplemente hacía su trabajo. Lo hemos dicho siempre, porque no hay evidencia contraria, fue un caso aleatorio, nada contra el show; se encontraba en el lugar y momento equivocado. Pero eso no significa que nos haga sentir mejor”, apunta Newman.
El productor aseguró que este hecho obligó a que la seguridad alrededor de la producción se fortaleciera, sin embargo, “no nos sentimos en peligro. México es un gran lugar para trabajar y realmente lo disfrutamos”, explicó.