SAN SEBASTIÁN. Con un retrato de casi 40 años de desarrollo de la lucha armada de ETA y las heridas que se produjeron a través de los ojos de dos familias divididas por la violencia, la serie Patria, dirigida por Aitor Gabilondo, fue presentada hoy en la 68ª edición del Festival de Cine de San Sebastián.
Una serie desgarradora, de ocho capítulos, basada en el libro del mismo nombre de Fernando Aramburu y que estará disponible en la plataforma HBO a partir del próximo día 27.
La serie, ambientada en el País Vasco y con flashbacks de un largo período de tiempo, se ha visto por partes o completa, en un bloque de ocho horas, en San Sebastián, con gran expectación desde hace semanas e incluso una polémica por el cartel de gran dimensión que instaló la plataforma audiovisual en la Plaza de Callao, en Madrid.
En el Kursaal, sede del Festival de San Sebastián, en medio de las medidas de seguridad por la pandemia del coronavirus Covid-19, el director de la serie, Aitor Gabilondo, quien invirtió tres años para realizarla, señaló que espera que con ella se contribuya a que haya más reconciliación en el País Vasco.
“Que una serie de televisión permita matizar es un regalo, pero es una ambición desmedida que remueva nada después de tantos años”, reconoció, aunque añadió que “si abre debate, opiniones y controversia me parece que ya es mucho”.
La historia gira en torno a las mujeres, a las madres vascas, que en la serie interpretan las actrices Ane Gabarain y Elena Irureta, quienes coincidieron en que han trabajado “con las tripas”, con amor, con mucho dolor, con mucho corazón y dándolo todo.
Gabarain confesó que su mayor temor era que su personaje “fuera llevado al estereotipo y no dotarlo de humanidad” y en ello estuvo trabajando obsesivamente, para que fuera “persona”, que se entendieran su amargura, su torpeza muchas veces y las cosas que hacía.
A su vez, Irureta expresó que “quería plasmar bien el salto que ella da con la edad, de estar encerrada en sí misma y deprimida, a querer que le pidan perdón para marcharse en paz”.
PREMIO A ISABEL COIXET
Por su parte, reivindicando la importancia de la cultura, la directora y guionista española Isabel Coixet recibió hoy el Premio Nacional de Cinematografía 2020 por poner en valor una trayectoria de más de tres décadas caracterizada por abrir nuevos caminos en el cine español y por transitar su obra por ámbitos geográficos, culturales, lingüísticos y estilísticos diversos.
En un reducido aforo del Centro de Cultura Contemporánea Tabakalera, dedicó su discurso a los cineastas que empiezan. “Incluso para los que la desprecian, la cultura es el futuro”, dijo la cineasta al recibir el galardón de manos del ministro español de Cultura y Deporte, José Manuel Rodríguez Uribes.
Coixet (Barcelona, 1960) agradeció el galardón y la compañía en el acto de compañeras de profesión como las directoras Icíar Bollaín y Elena Trapé o las actrices Leticia Dolera, Candela Peña, así como directores de los principales festivales de cine, productores, distribuidores y representantes institucionales.
Compartió reflexiones de algo, dijo, que le hubiera gustado escuchar cuando inició en la industria cinematográfica entre ellas saber porqué quienes empiezan en ella quieren hacerlo, no temer miedo a la cámara, leer, observar, no perder el tiempo en quejas de lo que no se consigue y asumir que esto no es fácil.
“He estado en ese limbo que no lleva a ningún sitio, abandónalo cuanto antes, ponte las pilas y si no te las pones no te quejes, o quéjate sin que nadie te vea, es muy aburrido”, dijo, pero agregó que los festivales de cine “son una trampa, porque hace como 30 años me senté muy cerca de aquí a leer los periódicos que destrozaban mi primera película”.
“Estuve en shock y pasaron siete años antes de que pude hacer la segunda y hoy, al pasar por el sitio, pensé que me hubiera gustado decirle a esa chica que se deshidrató llorando en la terraza, que los festivales de cine son sitios estupendos para descubrir películas, para abrir caminos, pero también son las plazas de toros donde se torean los egos de los directores, de los productores, de los actores y de los directores de festivales”, compartió
Coixet, ganadora de ocho premios Goya como directora o guionista y una cineasta con proyección internacional advirtió en sus consejos que “si tienes un ego pequeño y frágil, sufrirás, pero no es el fin del mundo”.
También dedicó su discurso a las mujeres cineastas que tratan de abrirse camino y aseguró que “la mala noticia para ellas es que el esfuerzo se multiplica por mil” pues “os insinuarán que todo lo que tenéis es por ser mujeres, pero paradójicamente os pondrán obstáculos por serlo”.
Sin embargo, recalcó que “por fin siento que esto está cambiando, hay un interés real más allá de los eslóganes por nuestra mirada y nuestra manera de estar en el mundo”.
El ministro español de Cultura destacó el “trabajo de clara proyección internacional” de Isabel Coixet”, cuya obra, rodada en español e inglés y en diversos países, “ha transitado por todo tipo de culturas y lugares”