Admite que no ha logrado la sobriedad total, pero para él, llevar unas semanas sin beber ginebra es como ganar la guerra. Así lo canta Gastón Espinosa, un rapero originario de Cancún mejor conocido como LNG/SHT entre los círculos hip hop de México. Su nueva canción, Sobrio y confundido, refleja bien la sinceridad no exenta de humor con la que se maneja en la vida y en la música.
Este rap tiene tintes autobiográficos y no tiene empacho en admitirlo. Desde siempre le ha gustado escuchar y crear música que confluya de la vida a la palabra. “Porque escribir canciones solito en tu cuarto, no tiene ningún gramo de reto”, asegura. “Pero cuando lo vives y luego lo pones (en una canción) dices: ‘no sé si quiero que sepan todo esto de mí’. Aunque al final lo haces, porque ni que fuéramos tan importantes”, dice.
La escena del hip hop en México ha crecido notablemente en los últimos 20 años. LNG/SHT es una nomenclatura bastante reconocida en ese ambiente. Desde hace ya varios años que Gastón dejó su carrera de Derecho para rapear.
“El arte más interesante es el que no se guarda nada, el que es honesto, el que es crudo”, comenta Gastón, quien admite que tuvo muchas dudas acerca de cómo la gente iba a recibir su nueva canción sobre el alcoholismo.
“Vivimos en un país alcohólico, en un mundo alcohólico. Creo que el consumo de drogas y de alcohol es más alto que nunca en la historia. Al final del día, (en este tema) hay un razonamiento más allá de que nos gusta pasarla bien bebiendo”, observa. Y es que para él el alcohol se ha convertido en un instrumento para sobrellevar la ansiedad a la que te conduce la vida moderna.
“También la usamos como una herramienta para lidiar con la inconformidad de nuestras vidas; socialmente es una forma en la que nos tienen controlados”, dice LNG/SHT, quien admite que aún no logra tomarse su última cerveza. Su máximo periodo de sobriedad duró casi tres años. Fue en ese tiempo en que se dio cuenta que su vida era otra. Hoy, su reto es encontrar un equilibrio.
“El objetivo es consumir sustancias sin tener que abusar de ellas. Y con sustancias me refiero al alcohol”, afirma.
Esa intención, que inevitablemente conlleva cierta madurez, lo llevó a componer su nuevo disco que lleva por título Buenos adultos, justamente en alusión a la idea de entender ese paso de la juventud a la primera etapa de la adultez, donde beber cinco veces por semana no lleva necesariamente al éxito.
Al final, sin embargo, siempre carga dentro un impulso rebelde y juvenil, el mismo que lo empuja a escribir letras honestas con ritmos pegadizos influenciados por un alud de sonidos que van desde el punk hasta el ska más clásico, pasando por una tradición de rap español muy marcada.
“Mi vida llegó a un punto en el que tienes sueños cada vez más ambiciosos y proyectos más grandes, y te das cuenta que tomar cinco días a la semana no te va a ayudar a lograrlo como cuando tenías 25 años y tal vez podías ponerte un perdón a las 10 de la mañana y sacar la chamba”, concluye el rapero.