Debido a que existe la probabilidad de que Cipriano Charrez, exdiputado federal desaforado, haya atentado contra la vida de su hermano Pascual N.N., la jueza de control dictó un auto de vinculación a proceso, es decir, deberá enfrentar un proceso penal por el delito de homicidio doloso agravado en grado de tentativa.
Asimismo, subsistirá la medida cautelar impuesta que fue de tres años de prisión preventiva oficiosa. Aunado a ello se suspende el goce de sus derechos político-electorales.
La jueza de control, Janette Montiel Mendoza, dio dos meses de plazo para el cierre de la investigación preliminar, ello a pesar de la oposición que hizo la defensa que sólo pedía 15 días de plazo a diferencia de los seis que solicitó el agente del ministerio público.
De acuerdo con los hechos narrados por el agente del ministerio público, Cipriano junto con otras tres personas arribó al domicilio de Pascual en donde lo obligaron a salir, lo golpearon y sometieron; una vez sometido se presume que Cipriano arguyó palabras altisonantes y amenazas de muerte en su contra, mientras ejercía sobre él una acción de estrangulamiento.
Durante los actos de defensa se pretendió acreditar que dichas acciones no eran posibles, toda vez que no había lesiones en la víctima al momento de la revisión médica que se hizo dos días después.
Cabe señalar que al término de la audiencia se llevaron detenido al chofer de Cipriano. Al momento no hay más datos.