El Rock no ha muerto: visitando El Chopo, un universo alternativo y cultural

Los amantes de este género tienen en este lugar un sitio de encuentro para compartir sus conocimientos pero también refuerzan su identidad

Erick Gómez / La Prensa

  · lunes 2 de diciembre de 2024

El Chopo se coloca cada 8 días a un costado de Buenavista. Guillermo Pantoja / La Prensa

Es sábado y las manecillas del reloj marcan las 10 de la mañana, cuando la calle Juan Aldama en la colonia Guerrero comienza a vibrar al ritmo único de los riffs de guitarra y beats electrónicos que emergen de pequeñas bocinas repartidas por los puestos del Tianguis Cultural del Chopo, que invitan a los artistas rebeldes, a los melómanos y a los amantes de lo alternativo, a un intercambio de cultura y gustos.

Saliendo del Metro Buenavista, un grupo de cuatro personas de botas robustas, pantalones entubados y playeras negras, inician su odisea en este mercado que en primer instante te atrapa con su inconfundible mezcla de olor a cuero, incienso y mezclilla que toma sentido al voltear a los alrededores y ver la mercancía de los múltiples quioscos desmontables que se instalan a lo largo de la calle.

La entrada se convierte en un desfile de camisetas con estampados de Metallica, Nirvana, KISS, AC/DC y algunas otras joyas menos conocidas que hacen un llamado a nichos específicos. Cada prenda lleva consigo historia y significado que los vendedores de melena larga y brazaletes con picos, conocen a fondo e incluso lo llevan con tinta en la piel; pasando de vender mercancía, a ofrecer identidad.

Los puestos ofrecen una gran variedad de productos. Guillermo Pantoja / La Prensa

Puestos más adelante encontramos museos acústicos, con una increíble variedad de música de diversos géneros, bandas, solistas y en sus múltiples presentaciones. Un señor de estatura promedio, chaleco azul cubierto de parches le pregunta al vendedor 'si tiene el disco Niño sin amor del TRI', a su lado, un joven de complexión delgada y anteojos circulares pregunta por el precio de un vinilo de The Beatles que encontró en una de las cajas polvorientas que guardan infinidad de álbumes.

Cerca del mediodía, el humo y el fuerte perfume a tinga de pollo, te acerca a un puesto de quesadillas listas para recargar tu energía. Al lado, un carrito de supermercado carga el sustento de una señora dedicada a vender papas, raspados y refrescos preparados, siendo el tehuacán preparado con limón y sal el preferido de los visitantes para quitar la sed.

La moda es un elemento indispensable que no puede faltar. Guillermo Pantoja / La Prensa

Luego de la parada técnica y al caminar más, sujetos con sus manos llenas de tinta, te inducen a conocer sus creencias, sentimientos y pensamientos a través de impresionantes obras plasmadas en lienzos colgados a su alrededor, esperando a que lleguen a otros puntos de la ciudad después de narrar con entusiasmo las historias detrás de sus creaciones.

Poco a poco las vibraciones dentro de tu cuerpo a cargo de la batería que se está tocando al final del mercado en un escenario donde el vocalista de botas desgastadas, mohicana roja de picos y lentes oscuros canta con pasión, mientras que los espectadores corearon con cerveza en mano, cabecean al ritmo de la música y algunos otros sacan el estrés de la semana bailando slam.

Las distintas generaciones se entrelazan en un cambio de conocimiento y gustos personales. Guillermo Pantoja / La Prensa

A los alrededores del concierto, personas con una caja de cartón hecha por ellos donde cabe perfectamente una pila de discos, hacen trueque de disco por disco. Las distintas generaciones se entrelazan en un cambio de conocimiento y gustos personales.

El chopo no solo es un mercado, es un mundo donde el tiempo se detiene y las culturas urbanas 'poco comunes' se dan una pequeña dosis de contracultura. Y mientras el sol se esconde, los puestos se desarman, dejando que la calle continúe con su cotidianidad que vive de domingo a viernes, pero el eco del Chopo permanece, como una promesa de que, el próximo sábado, las puertas a este patrimonio cultural de la CDMX volverán a abrirse.