"La ex Hacienda La D es un lugar ubicado en el municipio de Pedro Escobedo, estado de Querétaro y tiene mucha historia, pues es un edificio construido en 1718 que conserva su casco original, que la convierte en un sitio mágico.
La ex Hacienda La D se encuentra aquí
Cada mes, la familia Fausto Zorrilla Landeros organiza el evento “Mole, huapango y tradición”, un espacio donde los visitantes pueden disfrutar de un rico mole de guajolote, hecho con ingredientes de la región, acompañado de tortillas hechas a mano y mezcal, y amenizado por tríos huastecos que interpretan música popular.
Además, la gente puede disfrutar de otros platillos, como el caldo de pollo, tacos dorados, enchiladas verdes, y mole de pollo, en caso de que lo tuyo no sea el guajolote. Para la cena, se ofrecen quesadillas, chanclas de tamal, café de olla y postres hechos en casa.
El evento inicia a las 3:30 de la tarde, con la comida al gusto. A las 5 se realiza una presentación musical de algún cantante local, para después, a las 6:30 de la tarde, disfrutar de la música del huapango y terminar con el ballet folclórico, que da una muestra de las variantes del huapango huasteco. El evento termina entre las 11 y las 12 de la noche, cuando la verbena llega a su fin.
En ocasiones, se puede disfrutar de una kermés gastronómica con puestos de comida de la zona, y disfrutar de bebidas locales como la cerveza artesanal “Manuela”, que se produce en el municipio de Pedro Escobedo.
Los más pequeños del hogar también pueden disfrutar, pues hay una zona de juegos infantiles, y para los amantes de los caballos, pueden solicitar un paseo."El lugar está lleno de árboles frutales de temporada como la chirimoya, camelinas, no me olvides, huele de noche, naranjas agrias y dulces, fresnos, planta de Cristo, malvones y zapote blanco.
Pero lo mejor de la ex hacienda, es el gran zapote que se encuentra en el centro del restaurante, que está al aire libre, que transmite mucha energía y que se considera de lo más bonito del lugar.
Historias de la Revolución
Damaso Fausto Zorrilla, bisabuelo de la familia, llegó de Santander, España y adquirió la hacienda junto con el abuelo de Diego Fernández de Cevallos. Tiempo después, la sociedad se terminó, y Damaso se quedó con ella, para después heredar a su hijo Guillermo Fausto Zorrilla Martínez, personaje conocido en Pedro Escobedo como Don Memo, quien a su vez heredó parte del casco a Martha Mireya Landeros y ahora es ella junto con sus hijas, quienes administran el lugar.
La hacienda tiene más de 200 años y se cuentan muchas historias, alrededor de ella, por ejemplo, que ahí se escondió el General Álvaro Obregón en los tiempos de la revolución mexicana, y que los hoyos que se encuentran en la pared del casco, fueron provocados por un fusilamiento que se llevó a cabo en la misma época.
También se dice que la hacienda está muy bien protegida, pues en su troje hay tres vírgenes labradas, la Virgen de San Juan de Los Lagos, la Virgen de Santa Bárbara y la virgen de Guadalupe, quienes resguardan el lugar.