Una pareja de comerciantes fue ejecutada a balazos por sujetos armados que se desplazaban en una motocicleta. El doble crimen ocurrió mientras se encontraban a bordo de una camioneta, frente a su domicilio localizado en la colonia Aragón Inguarán, perteneciente a la alcaldía Gustavo A. Madero.
Las primeras investigaciones de la policía señalan que los ahora occisos fueron identificados como Odely y Adrián “N”, alias El Pecas, quien conducía la camioneta.
A través de su cuenta de Instagram, el negocio de licuachelas, ubicado en la calle de Jesús Carranza 25, en el barrio de Tepito, confirmó que se trata de ellos.
“Muchas gracias a todos. Soy Barbie, Dolls sigue de pie, como ellos querían”, escribieron en una historia.
De acuerdo con los primeros reportes, cuando las víctimas salieron del garaje de un predio ubicado sobre Congreso de la Unión, metros antes de llegar al cruce con avenida Talismán, sus agresores, quienes al parecer ya los esperaban sobre un potro de acero en color negro, al tenerlos al alcance, abrieron fuego contra éstos.
El sujeto que iba tras el volante y la mujer que viajaba como copiloto, quedaron inmóviles y ensangrentados sobre el vehículo marca Volkswagen tipo Atlas Cross Sport, en color blanco. Dispararon contra ellos en por lo menos siete ocasiones.
Tras los hechos ocurridos alrededor de las 20:00 horas de este miércoles, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX arribaron al sitio y, tras encontrar a los sujetos malheridos, solicitaron la presencia de los servicios de emergencia.
Los paramédicos pertenecientes al Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), que atendieron el reporte, únicamente pudieron certificar el fallecimiento del hombre y de la mujer.
Inmediatamente, se desplegó un operativo para intentar dar con los responsables, quienes a través de las cámaras de videovigilancia, fueron vistos emprender la huida sobre avenida Centenario con rumbo hacia el Estado de México.
"Yo salí cuando escuché las sirenas de las patrullas, llegaron un chingo. Eran comerciantes, la verdad no sé qué vendían, pero tienen negocios", dijo haciendo un guiño un vecino del lugar, quien se acercó al acordonamiento a observar la camioneta que se detuvo al chocar ligeramente contra la guarnición del camellón que divide los carriles centrales de los laterales.
Decenas de personas se comenzaron a llegar de a poco, hasta conjuntar un grupo de unos 50, entre ellos familiares y amigos de los occisos. Muchos de ellos llegaron a bordo de motocicletas y motonetas, queriendo burlar el acordonamiento de manera desesperada.
Aproximadamente a las 21:00 horas arribaron integrantes del área pericial y Forense de la Fiscalía capitalina y, tras recabar los indicios necesarios, entre el llanto y gritos de lamento y dolor de una mujer que se encontraba entre los presentes.
Nota publicada en La Prensa