El homicidio del bombero Javier Salinas García fue una ejecución directa, cuyo presunto responsable y “el que le puso el dedo” ya fueron detenidos por la Policía de Investigación en la colonia Pensil y trasladados al Reclusorio Norte, informó ayer Porfirio Edmundo Garrido Osorio, procurador general de Justicia local.
Durante una conferencia de prensa, dio a conocer que se interroga a los detenidos para saber el móvil del crimen, el cual fue perpetrado con una pistola calibre .380 en una tienda de autoservicio de la delegación Cuauhtémoc.
A su vez, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, José Ramón Amieva, afirmó que Ismael Figueroa, líder sindical de los bomberos ya se presentó a declarar voluntariamente sobre el caso.
En el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, el abogado de la capital informó que los presuntos responsables tienen 59 y 60 años de edad, ambos tienen antecedentes penales por robo, portación de arma y lesiones.
De acuerdo con los primeros resultados de la investigación, el primero de los sujetos, quien el día de los hechos vestía un traje de color claro, llegó hasta una tienda de abarrotes, ubicada en la colonia La Esperanza, y abrió fuego a quemarropa sobre su víctima.
Posteriormente, gracias a un cerco virtual de cámaras del C5, se le detectó que escapó de la escena del crimen en un taxi, el cual lo traslado hasta la colonia Pensil, delegación Miguel Hidalgo, donde tiene su domicilio.
El sujeto de 60 años al parecer acompañó al presunto homicida para enseñarle a quién tenía que matar, tras de lo cual huyó en una motoneta verde y negra, la cual fue localizada en la misma zona.
Testigos presenciales del asesinato reconocieron a los dos detenidos como los partícipes en los hechos, uno de ellos fue el autor material del homicidio, y el otro fue cómplice.
Con los resultados de las investigaciones, testimonios y videos, la Procuraduría General de Justicia local
obtuvo de un juez de control las órdenes de aprehensión contra los sospechosos, que ya se complementaron, por lo que los imputados fueron ingresados al Reclusorio Varonil Norte, y puestos a disposición de un juez de control para que los vincule a proceso y les dicte la prisión preventiva oficiosa como medida cautelar.
Finalmente, el jefe de Gobierno local dijo que la información se proporcionó con base en las reglas emitidas por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal y se dio un mensaje a los familiares de Javier Salinas de que no habrá impunidad.