Un pentagrama invertido de dos metros con tonalidades rojas, y al centro una figura con el tamaño real de un niño sentado en un sillón rojo, con barba de chivo y un traje tipo charro, es el altar del Angelito Negro instalado desde hace tres años en Tepito, en la Ciudad de México.
Desde noviembre de 2020, cientos de personas acuden a la casa ubicada en la calle de Carpintería número 35, en la colonia Morelos, para pedir milagros, agradecerle, rendir culto o dar ofrendas a la figura con cuerpo y cara de niño, pero con cuernos y barba de chivo.
Alexis, “El Chino”, instaló el altar en un cuarto de su casa luego de que acudió al templo del Angelito Negro en Pachuca, Hidalgo, para pedir que curara a su madre de cáncer. A cambio, prometió que instalaría un altar muy grande en Tepito, para que la gente lo conociera.
“Se le viene a venerar y a rendirle culto al ‘Angelito Negro’. Yo lo puse por una promesa que yo le hice, que si me cumplía yo le iba a poner un altar muy grande. Mi madre tenía cáncer, le querían quitar su pecho, y yo le prometí que si él me ayudaba a sacarla del cáncer y que no le quitara su pecho, yo le iba a hacer un altar grande para que toda la gente viniera a conocerlo y sepa que enverado no es malo, los malos somos nosotros, los que pedimos cosas malas somos nosotros”, dijo.
El altar está acompañado por decenas de velas prendidas a nivel de piso, ramos flores, bebidas alcohólicas, cigarros, juguetes, dinero, y hasta una cabeza de cerdo y toro que fueron ofrendadas por los seguidores del culto.
También hay dos cuadros con imágenes de demonios, alrededor de 20 figuras de demonios y representaciones del Angelito Negro, un cuadro colgado en la pared que alberga una oración con un pentagrama invertido sobre ella, y otra oración que cubre todo el techo.
Cada primero de noviembre se festeja al Angelito Negro, y el primer viernes de cada mes se le celebra o rinde ofrenda. En esta ocasión resaltó un dibujo con un chocolate que dejó un niño como agradecimiento.
“Tenemos un estigma muy mal de él, de que no te acerques a él no le pidas a él porque es el malo, y nosotros somos los malos, sinceramente (….) Para mí no es un bebé, es algo más que un niño. Mucha gente lo ve como un bebé porque está pequeño y tiene cara de niño, pero para mí, no es un bebé”, señaló Alexis.
A la casa marcada con el número 35 asisten personas que llevan mucho años rindiendo culto, pero también quienes por primera vez acuden para pedir que les vaya mejor en el trabajo, como Ángel Mena, de 60 años, quien viajó desde Tultitlán, en el Estado de México, para conocer la que algunos llaman religión.
“Ya tiene muchos años que dejé de creer en la religión católica. Me dedico a vender en los tianguis de por mi rumbo, pero hay veces que la venta está muy floja. Me comentaron del Angelito Negro y voy a poner toda mi fe en él, ya puse mi fe en otras y no me ha funcionado”, contó Ángel Mena.
Giancarlo Mendoza, “El Cuyo”, y Ana Cristina Guerra Franco, “La Bombón Asesino”, quienes siguen el culto desde hace nueve años, llegaron al mediodía para agradecerle al Angelito Negro, pues aseguran que les ha cumplido milagros, como curar el cáncer y hacerlos padres.
“Para nosotros es una religión, es todo. Yo tenía ocho años cuando me regalaron un diablo y mi mamá lo tiró a la basura, y de ahí dije 'no', yo soy del diablo. En un año tuve tres accidentes: el primero nos fuimos a estrellar un muro de contención, el segundo un derrape, y hace un mes me aventó un carro y recibí unos tubazos en el estómago, y ve, mi bebé está intacto”, dijo Ana Cristina.
“El Chino” señala que cada año recibe a más seguidores del Angelito Negro, y que ya hay creyentes en España, a donde recientemente llevó una figura.
“En España le ponen muchas ofrendas los amigos de él. Está por abrir un altar allá en España del angelito que yo le regalé”, dijo Alexis.
De acuerdo con Alexis, “El Chino”, para rendir culto al Angelito Negro no hay oraciones que profesar ni ofrendas exactas que poner, pues señala que lo más importante es que las cosas que solicites sean sinceras.
La semana pasada, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) realizaron un cateo en una casa ubicada en Tepito que tenía un altar con figuras del Angelito Negro, en donde detuvieron a un presunto integrante del grupo delictivo la Unión Tepito.