Ante los cuestionamientos de los delitos que se han presentado en los primeros 100 días de gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo, a esto le dedicó buena parte del discurso a destacar que "es culpa del anterior gobierno".
Equivocada no está la primera mujer electa para gobernar la ciudad, aunque estas declaraciones causaron confusión al no tener claro cuándo bajarán los delitos en la ciudad.
También durante su toma de protesta, el pasado 5 de diciembre, expuso que iba a garantizar los derechos laborales de los trabajadores del gobierno de la ciudad pero a la vez prometió desaparecer mil 712 plazas de altos niveles de estructura, y 32% del presupuesto para plazas de honorarios.
Si bien ha marcado diferencia en comparación con otros exjefes de gobierno con apuestas como la declaración 3 de 3 de los secretarios, subsecretarios y directores generales del gobierno de la ciudad, la más ambiciosa y celebrada es la creación de una nueva dependencia llamada Agencia Digital de Innovación Pública, que tiene como objetivo acabar con la corrupción pues a través de una plataforma se hará pública de manera constante el trabajo que realizan los funcionarios que integran su administración.
Pero hasta la fecha se mantiene en su política de rechazo a la cacería de brujas pues no ha demandado por alguna corrupción, incluso en aquella que se lanzó directamente con el Heroico Cuerpo de Bomberos.
La mandataria había anunciado que las puertas del gobierno de la ciudad iban a estar abiertas, y no llena de policías como lo tenía la anterior administración, pero ha utilizado elementos para desalojar y evitar que vuelvan los vendedores indígenas.
Sheinbaum Pardo había indicado que no tendría guardaespaldas, pero si tiene alrededor de siete personas que siempre la están cuidado, los mismos que la apoyaron durante su campaña política.
Además, Jesús Padilla Zenteno, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Ciudad de México, pidió a Sheinbaum revertir los datos negativos que se observaron en diciembre y enero en materia de seguridad y empleo, gran reto que es vital para la ciudad.
A la jefa de Gobierno le restan cinco años y ocho meses para hacer de la capital una ciudad segura, con menos desigualdad educativa, laboral y económica.