La Ciudad de México cumple 10 días de estabilización hospitalaria y para seguir con esta tendencia, ya no será necesario tener síntomas de la enfermedad Covid-19 para acceder a una prueba, informó, la secretaria de Salud (Sedesa), Oliva López Arellano.
Agregó que consiste en que los ciudadanos que han tenido contacto directo con casos sospechosos se realicen una prueba y con ello buscar cortar la cadena de contagios, esta es una nueva estrategia como parte del fortalecimiento de las acciones para avanzar a otro color del semáforo, actualmente se mantiene en naranja.
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“Ahora lo que estamos haciendo es más allá de que la persona tenga uno o dos o tres síntomas, puede llegar una persona sin ningún síntoma, pero que tiene un antecedente de contacto directo, entonces sería un contacto sospechoso, y a estas personas le estaríamos tomando muestras”, explicó.
El gobierno capitalino cuenta con quioscos y en las explanadas de las alcaldías para aplicar la prueba Covid-19, pues se busca que en las 158 colonias prioritarias se aumente a mil 500 pruebas diarias.
La positividad en la Ciudad de México es del 21 por ciento por el momento, mientras que en mayo, mes crítico en la atención a la pandemia, de cada 100 personas a las que se le realizaba una prueba, el 74 por ciento era positiva.
La ocupación total en los Hospitales Covid-19 de la capital es de 2 mil 607 camas: mil 920 no intubados y 687 intubados. En total dentro de la Zona Metropolitana del Valle de México hay 3 mil 472 camas: 2 mil 613 no intubados y 859 intubados.
La disponibilidad de camas de hospitalización general es de 61.1 por ciento y de 66.4 por ciento en camas con capacidad de intubación.
La Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, destacó que la ciudad registra como 10 días, más o menos de estabilización en la ocupación hospitalaria.
“Queremos entrar a una racha de disminución de hospitalizaciones a partir del incremento del número de pruebas”, comentó.
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