Ayer el embarcadero Nativitas de Xochimilco fue una versión desolada de sí mismo. A ratos casi en silencio, con más trabajadores que visitantes, y los que había eran en su mayoría turistas extranjeros. Si bien es temporada baja, los remeros admiten que la baja afluencia se debe también al accidente del domingo pasado, cuando José Manuel festejaba su cumpleaños y tras intentar pasar de una trajinera a otra cayó al agua y no logró salir. Los viernes se suele ver a jóvenes universitarios celebrando en los canales de Xochimilco, pero no ayer.

La situación no es extrema para la gente que se dedica al negocio de las trajineras en los 10 embarcaderos de Xochimilco.

Confían en que este fin de semana las visitas se repongan. Comentan que pasadas las fiestas patrias será un buen momento para medir el impacto de la muerte de Juan Manuel, por ahora no hay preocupación.

Los esfuerzos se centran en crear más conciencia sobre el consumo responsable de bebidas alcohólicas, en coordinación con la alcaldía.

Menos alcohol, más diversión, así dice la campaña que lanzó ayer la alcaldía de Xochimilco, así como un nuevo reglamento que restringe el consumo de alcohol a máximo una botella por trajinera y tres cervezas de 355 mililitros por persona.

¿Cómo tendrán certezas de que se respete está regla? se le preguntó al director de Turismo y Fomento Económico, José Luis Saldívar, a lo que respondió que no harán revisiones de bolsa o mochilas, pero sí rondines permanentes para hacer apercibimientos.

La autoridad no piensa en criminalizar las reuniones juveniles en las trajineras, por lo que descarta remisiones al juzgado cívico a menos que las personas adopten una actitud violenta. La apuesta es la educación sobre el consumo responsable, la obligación de que los prestadores de servicios ofrezcan chalecos salvavidas y la capacitación en primeros auxilios a los remeros.

La nueva reglamentación, en vigor desde ayer, establece que las personas que declinen a usar chaleco salvavidas deberán firmar una carta responsiva con el prestador de servicio. Este proceso será obligatorio a partir del 1 de octubre, ya que los propietarios de las más de mil trajineras deberán comprar y adaptar los chalecos salvavidas.

Los remeros comentan que si bien una trajinera tiene capacidad para trasladar a 20 personas, en el caso de fiestas o reuniones juveniles, se limitará a 16, como una manera de evitar hacinamiento.