Calor derrite zonas centro y oriente de CDMX

En la ciudad se registran 3 grados más en regiones urbanizadas que en lugares con áreas verdes

Israel Zamarrón | El Sol de México

  · jueves 21 de febrero de 2019

Estos jóvenes se cubren del intenso sol mientras se encuentran en la Alameda Central / Foto: Daniel Galeana | El Sol de México

Esta semana el termómetro ha rondado los 30 grados –y se mantendrá así en los próximos días-, pero el calor no se siente igual en toda la Ciudad de México. De acuerdo con Atlas de riesgo por temperaturas máximas es el centro y oriente de la capital donde más se resiente el calor, aunque también una parte de las alcaldías de Miguel Hidalgo y Gustavo A. Madero.

Esto es así ya que se trata de zonas densamente urbanizadas con poca disponibilidad de metros de área verde por habitante, y es que mientras los árboles mitigan los efectos del calor, las edificaciones y el asfalto lo absorben y por ello en los polígonos urbanos puede haber hasta tres grados más en el termómetro con respecto a zonas con áreas verdes.

Por ejemplo, en las alcaldías de Benito Juárez y Cuauhtémoc, ubicadas en el centro urbano de la capital, se disponen de 3.3 y 3.5 metros cuadrados de área verde por habitante, y por el contrario, abundan los rascacielos, construcciones de vivienda, avenidas congestionadas y todo ello contribuye a la formación de islas de calor.

Este fenómeno implica que materiales como el asfalto de las avenidas o los cristales y muros de los edificios absorben gran cantidad de radiación solar durante el día, misma que se libera de manera paulatina y tarda en dispersarse, incluso después del atardecer, por lo que la sensación de calor se extiende durante gran parte del día, tanto en interiores como exteriores.

La formación de islas de calor urbanas no ocurre en alcaldías como Milpa Alta, Tláhuac, Tlalpan o la parte sur de Cuajimalpa y Magdalena Contreras, donde se asienta el suelo de conservación, ya que las áreas verdes y los árboles mitigan los efectos del calor.

Foto Cuartoscuro

Por ello el investigador del Instituto de Ecología de la UNAM, Víctor Luis Barradas, planteó la creación de parques modulares que adopte cuatro especies de árboles que mitigan los efectos del calor: liquidámbar, fresno, trueno y eucalipto.

En su investigación determinó que se necesitarían 17 árboles de liquidámbar de unos 30 años por hectárea para bajar la temperatura un grado Celsius. Con nueve fresnos o 16 truenos se obtendría el mismo resultado. En tanto para bajar la temperatura en tres grados se requerirían 51 árboles de liquidámbar y 25 fresnos en una hectárea.

De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) debido a la onda de calor el Valle de México ha registrado temperaturas de hasta 30 grados, lo cual es siete grados superior al promedio histórico para esta época del año, por lo que se estaría viviendo un clima de primavera en plan fase terminal del invierno.