La epidemia empujó a personas que vivían en hoteles, posadas o cuartos a regresar a las calles ya que el hospedaje cerró o porque el padrón económico los dejó sin ingresos. Como informó El Sol de México, por lo menos 150 personas han sufrido esta transición. La Secretaría de Inclusión y Bienestar Social (Sibiso) de la Ciudad de México ya detectó este fenómeno, pero no tiene una cifra de los posibles afectados.
En entrevista la secretaria Almudena Ocejo reconoce que hay personas que por la epidemia regresaron a vivir a las calles. A muchas de ellas, junto con cualquier persona en situación de calle se les brinda la opción de pernoctar en el albergue Coruña o en uno emergente que se habilitó, cuenta, pero seis de cada 10 rechazan esta opción y como autoridades no pueden obligarlos a asistir a los centros de ayuda.
Desde el año pasado la dependencia a su cargo trabajó para actualizar el censo de población en situación de calle. Se hicieron dos conteos preliminares y en marzo se estaba haciendo un tercero con acompañamiento del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), pero la emergencia sanitaria lo interrumpió. La cifra preliminar de los dos primeros conteos arrojó que hay cerca de mil 500 personas sin techo, que viven en el espacio público.
“Evidentemente con toda la emergencia vamos a ver cambios en este fenómeno, sería aventurado en este momento hablar de cifras, no solamente porque la población de calle es muy movible y muy variada su dinámica, sino que ahora estamos ante esta emergencia y posiblemente algunos otros grupos vulnerables se vean en alguna situación que los obligue a pernoctar en algún momento en la calle”, comenta Ocejo Rojo.
Por ello, añade, una vez superada la peor fase de la emergencia sanitaria “se tiene programado realizar el siguiente conteo de toda la ciudad porque es la única manera en que las cifras que se manejan, que no siempre tienen el sustento metodológico (…) ahí realmente sabremos de qué escala estamos hablando y en efecto cuántas son las personas que si es que están en este momento en situación de calle y no estaban es debido o fue un reflejo de esta emergencia”.
Este diario informó que de acuerdo con la asociación civil El Caracol –que históricamente ha trabajado en favor de la población en situación de calle- por lo menos 150 personas que vivían en hoteles, posadas o cuartos intentando dejar de vivir en la calle tuvieron que regresar a pernoctar en el espacio público debido a que se frenó el hospedaje o se quedaron sin recursos para pagar las rentas.
Brenda Raya, del Colectivo Callejero, también percibió esto. Este grupo de educadores de calle ha repartido 90 raciones de comida diaria y lo harán hasta que acabe mayo. Ubicados a un costado del Teatro Blanquita, han detectado que en las filas no solo hay población callejera, sino personas que fueron echadas de hoteles.