Mil 400 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina que hacían de escoltas de exfuncionarios y empresarios regresarán a las calles, sumado a vehículos que acompañaban estos actos, advirtió la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.
Las personas privilegiadas, según apuntó la mandataria, no pagaban por los guardaespaldas aunque representaban 21 millones de pesos al mes con cargo al erario público.
"Se están retirando policías que estaban como escoltas de quienes no debían tener pero que las anteriores administraciones lo fueron permitiendo. Se acabaron los privilegios", dijo.
Agregó que el destinar policías como escoltas ocurría a criterio del que fuera el secretario de Seguridad Pública en turno y que, en la última administración, se incrementaron.
“No es justo que la ciudadanía no tenga esos policías en las calles y que de manera gratuita estuvieran cuidando a determinadas personas”, aseguró ya que además utilizaban mobiliario del gobierno capitalino como patrullas.
Sheinbaum comentó, sin dar nombres, que el objetivo no fue señalar ni catalogar a los privados y funcionarios que tuvieron esta prestación.
Aclaró que solo les dejarán escoltas a los dos últimos jefes de gobierno, Miguel Ángel Mancera y José Ramón Amieva, así como a los extitulares de la Procuraduría General de Justicia y de la propia Secretaría de Seguridad Pública.
Por ello a partir de este jueves, los agentes policiales serán reasignados a labores de vigilancia y seguridad pública.
Finalmente la mandataria exhortó a aquellos que se quedan sin escoltas a contratar elementos de la Policía Bancaria y Auxiliar.
RESERVAN VEHÍCULOS ESCOLTA
Aunque era habitual ver al exjefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera acompañado tanto de personal como de vehículos de escolta, la Jefatura de Gobierno respondió a una solicitud de información hecha por El Sol de México que esa información era de carácter reservado.
La administración no entregó los datos sobre los modelos, año, marca, valor y número de autos destinados a salvaguardar la seguridad del entonces mandatario capitalino. Únicamente se mencionó que el valor global de la flota es de 698 mil 881.17 pesos.
En su respuesta, entregada el 4 de diciembre pasado, se describe en un oficio fechado el 13 de noviembre de 2018, que “los datos sobre los vehículos cuya divulgación se solicita, están relacionados con unidades vehiculares que son utilizados para seguridad y traslado a diferentes reuniones y eventos en que tiene participación el Jefe de Gobierno” por lo que su publicación, se dijo, “haría identificables los vehículos y por ende el lugar donde se encuentra realizando sus funciones el Jefe de Gobierno”.
Y se enfatiza: “el proporcionar la información solicitada”, como son modelo, año, marca, fecha de compra, proveedor y valor de factura de los vehículos destinados a la escolta del mandatario capitalino, “pondría en peligro la seguridad del Jefe de Gobierno así como de quien, en su caso, le acompañe a bordo de los vehículos en los referidos traslados, e incluso su propio grupo de seguridad”.
Asimismo se pudo conocer que si bien no existe un cargo como jefe de escoltas, sí está el director de Seguridad Estratégica, adscrito a la Coordinación General de Apoyo Técnico y Logística. Dicho puesto recae en Julián Antonio Juárez Hernández, encargado de cuidar a la máxima autoridad del gobierno de la Ciudad de México, con un sueldo bruto de 51 mil 874 pesos.
ESQUEMA NACIONAL
Tras asistir a la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores, Sheinbaum declaró que el secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana del gobierno federal, Alfonso Durazo, buscará un esquema nacional que ayude a las entidades a tener seguridad y que los recursos para este combate serán los mismos.
"Habrá coordinación en seguridad como la Marina, Policía Federal, y Defensa Nacional hacia la conformación de la Guardia Nacional que hasta marzo se va a tomar la decisión", mencionó.
Y agregó que para los superdelegados anunciados por el presidente Andrés Manuel López Obrador se van a emitir lineamientos por parte del gabinete nacional, donde el respeto a los gobernadores y jefes de gobierno deberá ser prioridad.